Ayer en horas de la tarde en Cuña Muerta 120 personas autodenominadas originarios de distintas comunidades de Tartagal se apostaron en la ruta Nº 34.
La comunidad había sido notificada de que no podían cortar la ruta porque constituía un delito y a su vez perjudicaba la asistencia a los inundados de Santa Victoria Este, sin embargo, no hicieron caso.
Fue ahí que efectivos de distintas áreas de la policía tomaron intervención a pesar del ataque de los manifestantes, logrando liberar la ruta. Producto del operativo, un agente y un cabo resultaron hospitalizados.
Por estas horas, la Policía sostiene el operativo para evitar nuevos cortes de ruta.