Política09/11/2016

Alfredo Olmedo, uno de los pocos que se animó a "bancar" a Donald Trump

Polémico como siempre, y siendo objeto de burlas y críticas por parte de todos, Olmedo estuvo ayer en varios programas de la TV nacional haciendo referencia a su apoyo al candidato Republicano. Le pegó.

El salteño Alfredo Olmedo era una figurita muy codiciada ayer por todos los programas políticos de canales de alcance nacional. El motivo: era uno de los pocos que se animaba abiertamente a manifestarse a favor de Donald Trump en las elecciones de los EEUU.

Por esa condición se peleaba con todos, panelistas, periodistas, opinólogos, politólogos, encuestadores, ya que mayoritariamente en la Argentina, todos estaba con Hillary Clinton. Olmedo fue uno de los pocos, por no decir el único dirigente político de todo el país que manifestaba su preferencia por el candidato republicano.

Olmedo, como Trump, también fue en su momento un "outsider" de la política, término que utilizan en los EEUU para hablar de aquellos que llegan a la política sin tener trayectoria ni cargos anteriores. Y eso es Trump, un magnate que nunca tuvo un cargo público. Poco le importó esa supuesta falta de experiencia al electorado estadounidense para darle su apoyo. Tampoco se fijó en todos los cuestionamientos relacionados a denuncias del tipo sexuales o xenófobas. "Trump dice que lo que gente piensa, por eso la gente lo apoya", dijo Olmedo ayer, mientras recibía una catarata de burlas. 

En relación a las denuncias por acoso sexual, abuso sexual y otras tantas, Olmedo se preguntaba: "¿Son denuncias mediáticas o hay alguna en la Justicia? A mí me pasó, me denunciaron y después la justicia demostró que todo fue una mentira. Por eso presenté en el Congreso un proyecto para que los que hagan denuncias falsas vayan presos", dijo Olmedo, quien hoy, vuelve a los primeros planos. 

Donald Trump ganó las elecciones de Estados Unidos: el mundo

Denostado por la elite del país, Trump tocó una fibra en la sociedad de Estados Unidos y construyó un movimiento formado, mayoritariamente, por trabajadores blancos, sin título universitario, que se han sentido relegados y dejados de lado por el progreso del país en los últimos años.