Por violencia de género, destituyeron al secretario administrativo del Concejo Deliberante
Antonio Herrera cumple funciones de secretario Administrativo y además tiene un cargo de planta como Jefe de Recursos Humanos del Concejo Deliberante capitalino. Habría golpeado a su pareja, empleada del cuerpo. Será sumariado.
La decisión se tomó por unanimidad a las 0,40 de este jueves, tras un debate previo en el que tres concejales pidieron prudencia para verificar los hechos y mantener al menos una reunión con la víctima, que también es empleada del Concejo Deliberante.
Después de un cuarto intermedio de casi 45 minutos, la decisión se adoptó por unanimidad, publica FM 89,9.
El hecho, cuyos detalles no trascendieron, había sido mantenido con discreción y tomó estado público en el recinto, cuando expiraba la extensa sesión en la que se habían aprobado modificaciones al Código Tributario, la Ordenanza Tributaria y el Presupuesto municipal para el próximo año.
La concejal Cristina Foffani (PO) pidió la palabra y dijo que “nos hemos enterado de un hecho gravísimo, que tiene que ver con una de las autoridades del Concejo Deliberante que es e el señor Herrera que actualmente cumple funciones de secretario Administrativo y que además tiene un cargo de planta como Jefe de Recursos Humanos”.
“Acabamos de conocer que ha sido protagonista de una paliza a su compañera, su novia, y que la situación grave fue expuesta la ante la Policía”.
Foffani pidió que se proceda a una medida sancionatoria, porque “no nos puede representar un individuo que utiliza la fuerza contra una mujer”. Reclamó la suspensión en el cargo, en el área de Recursos Humanos, ya que es jefe de la víctima y que se le brinde un tratamiento psicológico.
Virginia Cornejo, recordó que hay en Salta 47 denuncias diarias de violencia de género,” esto le hace muy mal al Concejo” y dijo que el objetivo es proteger a la víctima, a las posibles víctimas y afirmó que “no podemos mantener el voto de confianza a una persona que tampoco tuvo la más mínima respuesta de arrepentimiento”.
Romina Arroyo, David Leiva e Ignacio González se expresaron en duros términos.
“Hay cosas que yo no perdono; haber visto como vi a mi amiga, no lo perdono” dijo Ignacio González. Hay personas que dejan de representar a la institución”. Lamentó que la situación trascendió más de lo esperado y reveló que se aguardó una renuncia que nunca llegó”.
David Leiva dijo que hubo tiempo prudencial para que el responsable de la situación muestre su hombría de bien, como respeto a la agredida y a la institución que integramos. Como cuerpo le dimos un voto de confianza y hoy tenemos la responsabilidad quitarle ese voto. Hay que darle un mensaje a la sociedad acerca de cómo abordamos y resolvemos este tema”
Gastón Galíndez, Matías Cánepa y Alberto Castillo repudiaron el hecho con idéntica firmeza, pero los tres coincidieron en la necesidad de tomar recaudos que superen la mera información que se disponía en ese momento y apuntaron a la necesidad de reunir más datos concretos.
El cuarto intermedio unifico los criterios y los 18 concejales votaron por la destitución.