Nacional19/12/2017

Marcha contra la reforma: Ahora temen la desaparición forzada de un manifestante

Se trata de Leo Chávez, de 33 años, quien se comunicó por última vez con su esposa desde las inmediaciones del Congreso la semana pasada. El hombre padece un cáncer avanzado y tiene dos hijos. Lo buscaron sin éxito en hospitales y comisarías.

A pesar de estar recibiendo quimioterapia por un cáncer en estado avanzado, Leo Chávez decidió sumarse el jueves pasado a los miles de manifestantes que marcharon hasta el Congreso para protestar contra la reforma previsional.

Residente de José León Suárez, en el partido de General San Martín, Gran Buenos Aires, milita en la organización Barrios de Pie y caminó junto a la columna de la agrupación. Sin embargo, minutos después de las 19 llamó a su esposa, Viviana, para avisarle que volvería a casa porque era peligroso quedarse. Desde ese momento, no se supo más de él.

Su familia, según informó BigBang, está preocupada porque la especialista encargada de su tratamiento advirtió que, por su condición, puede sufrir pérdida de conocimiento si no toma su medicación.

Su esposa está desesperada. Según contó al citado medio, se casaron en febrero de este año y, un mes después, Leo descubrió que tenía cáncer. La pareja tiene dos hijos: uno de 12, que es discapacitado, y una nena de 4.

Acompañada por el abogado Emiliano Monti, la mujer recorrió varios hospitales sin ningún resultado. Además, las comisarías 5° y 6° aseguran que no alojaron a Chávez. Y, si bien intentaron comunicarse con algún representante de Gendarmería, la fuerza ya no responde sus llamados.

Por ahora, el único dato que alienta la esperanza de Viviana es una conexión de Leo a su WhatsApp ocurrida en la madrugada del domingo. Monti, mientras tanto, presentó un hábeas corpus en la tarde del lunes.

La familia puso a disposición del público los números telefónicos de Viviana (155-5614342) y de la cuñada de Chávez, Liliana (156-9757789) para el que tenga algún dato sobre su paradero.