El peor ladrón: Chorro salteño fue a vender lo robado a su víctima
El delincuente fue a vender zapatillas que había robado a otro vecino. La mujer, sorprendida por el descaro del sujeto le siguió el juego, accedió a comprarle el botín y cuando entró a su casa para buscar el dinero llamó a la policía. A los minutos, el ladrón terminó detenido.
Este episodio, de osadía o torpeza, sucedió hace pocos días en una casa de la etapa 3 del barrio Solidaridad y fue denunciado por una mujer de 25 años, quien el 13 de septiembre pasado, en horas de la madrugada, fue víctima del saqueo perpetrado por un delincuente de la zona, quien irrumpió en su vivienda y se llevó una bicicleta de su propiedad.
Tras darse cuenta del robo, la vecina radicó la denuncia del caso en la dependencia policial del barrio, pero al pasar los días y sin advertir avances en la búsqueda del ladrón, la vecina comenzó a realizar sus propias pesquisas, y así fue como pudo dar con la descripción y apodo del delincuente.
Con esos datos reunió otras pistas e incluso pudo identificar al sujeto gracias a la ayuda de otros vecinos, quienes, a cambio, pidieron mantenerse en el anonimato. A los días, en tanto, los esfuerzos de la mujer se verían aún más recompensados, pues el delincuente que había saqueado su casa regresó, supo InformateSalta.
Ocurrió el 26 de septiembre, a casi dos semanas del robar la bicicleta de la mujer. Esta vez, el ladrón golpeó las manos a la madrugada y esperó a ser atendido. Cuando la vecina salió lo reconoció en el acto, pero se contuvo y esperó a ver qué quería el sujeto, quien le mostró un par de zapatillas que querían venderle.
Asegurándole que todo estaba en regla y que necesitaba el dinero por una urgencia, la mujer no se apresuró y aceptó comprarle las zapatillas, por lo que le dijo que esperara unos minutos hasta que busque el dinero. Y el ladrón así lo hizo, sin saber que apenas entró a su casa, la joven alertó al 911 para que vengan de inmediato a detener al delincuente.
Luego de unos minutos, la mujer salió y mientras trataba de regatear, a modo de hacer tiempo, apareció en escena un patrullero. Los uniformados detuvieron al sujeto, a quien esposaron y subieron al móvil, mientras la vecina le reclamó al sujeto la devolución de la bicicleta que le había robado días antes.
Los policías se llevaron al acusado a la dependencia policial, donde el detenido quedó a disposición de la fiscalía penal 6, la que lleva adelante las actuaciones en busca de esclarecer, tanto el robo de las zapatillas como de la bicicleta de la vecina que, prácticamente, llevó adelante la captura del sujeto.
El peor ladrón, o uno de poca memoria.