Un baldío, entre un edificio y un colegio, trae muchos dolores de cabeza
El terreno, ubicado en calle Sarmiento al 700, está en estado de abandono y atrae todo tipo de insectos y alimañas que ponen en riesgo la vida de los vecinos y alumnos colindantes. Aseguran que alacranes trepan por las cañerías.
Un reclamo que lleva mucho tiempo, que pone en riesgo a vecinos, alumnos y administrativos de un colegio céntrico sigue sin resolverse. En febrero de 2018, InformateSalta se hacía eco de la primera denuncia que realizó el dueño del colegio Santo Tomás de Aquino, advirtiendo el peligro que les generaba un terreno baldío abandonado, colindante al edificio, ubicado en Sarmiento al 700.
Dos años después, nada cambió, el dueño no aparece y nadie se hace cargo de su limpieza, por lo que nuevamente tuvieron que pedir la colaboración de Somos Salta para hacer conocer que la problemática continúa.
Esta vez, fue la administradora del edificio, que también colinda con el baldío, Mariela Gomero Álvarez, quien habló en nombre de los vecinos.
“Está totalmente despoblado, se ha tirado la casa que estaba y lo dejaron sin atender, se crece la maleza, salen bichos, arañas, alacranes, ratas, víboras y es un criadero de mosquitos. Los alacranes suben por las cañerías, no hay desinfección que valga, no podemos avanzar”, expresó.
Al respecto, Ramiro Torres Galvéz, uno de los propietarios de la institución educativa, se sumó al reclamo de la mujer, recordando que en 2018 lograron al menos que se limpiara pero después nadie más se acercó hasta el lugar, que por estos momentos, está a la venta.
“Nosotros estamos todo el tiempo haciendo fumigaciones y limpiando, más de 400 personas asisten al colegio entre empleados y alumnos y sobre todo los niños, protegerlos a ellos. Nosotros nos debemos también a los padres que nos hacen los reclamos porque buscan la seguridad de sus hijos”, manifestó.
En este sentido, contó que se contactaron con la inmobiliaria a cargo de la venta pero no quisieron decirle quienes son los dueños. “Nos dicen que hagamos las denuncias que creamos, siempre una forma muy altanera de responder. No sabemos bien a quien pertenece”.