Víboras, alacranes, un foco infeccioso de dengue y hasta un aguantadero de jóvenes que se juntan a drogarse, es lo que tienen que aguantar vecinos del barrio 20 de Junio a raíz de un baldío abandonado que no tiene mantenimiento ni limpieza.

En diálogo con InformateSalta, Lucía, una de las vecinas, expresó su preocupación  por el espacio que propicia la aparición de todo tipo de alimañas. “Ayer con mi hija sacamos una cascabel. Quedamos temblando. Tuvimos que pedir ayuda a unos chicos para que la saquen. Yo tengo un nieto prematuro, mi vecina también, así que tenemos terror”, dijo.

La mujer explicó que el terreno tiene un dueño pero que nunca se acerca a limpiarlo ni a sacar las malezas. Además, indicó que pese a los intentos de hablar con la Municipalidad para hacer la denuncia, no logran contactarse. Llamaron a la policía pero tampoco apareció.