Educación06/07/2020

Estudiar en épocas de pandemia: el nuevo desafío del 2020

Esta es la nota de opinión ganadora del concurso de Periodismo, organizado por la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la UNSa, en el marco del Día del Periodista. No te la pierdas.

La pandemia no solo ha dejado al descubierto la vulnerabilidad en la economía salteña sino también el atraso en el ámbito educacional; ha llegado a demostrar una gran brecha entre los arcaicos métodos pedagógicos utilizados y la era tecnológica en la que vivimos, haciendo del aprendizaje un recorrido todavía más complicado a lo usual.

En un país en donde la educación universitaria es pública, debería ser imperativo que el estado proporcione los medios necesarios para que toda persona que quiera acceder a esta, pueda lograrlo. Pero ¿cuál es la cruda realidad? En Salta, donde la pobreza alcanza al 41,8% de la población, la actual situación sanitaria dejó en evidencia la desigualdad en nuestra sociedad. Una parte del alumnado se vio obligado a dejar sus estudios por no tener acceso a internet o por enfrentarse a la necesidad de salir a trabajar para asegurar la subsistencia de sus familias, siendo perjudicados por la poca empatía de algunos educadores negados a buscar una alternativa para estos casos particulares. Si bien la Universidad Nacional de Salta dispuso las Becas de Conectividad y los bolsones de alimentos para ayudar al alumnado, mucho no se puede hacer por los que viven en pueblos remotos en donde la única conexión a internet que tienen es en las afueras de los centros de salud (desprovistos de cualquier protección contra las bajas temperaturas) o los que están en una situación laboral precarizada.  

Otro punto a destacar es la baja adaptabilidad de los profesores y estudiantes al espacio virtual. Los educadores, acostumbrados a las formas tradicionales de enseñanza, no llegan a ajustar su pedagogía al espacio virtual, dependiendo completamente de archivos pdf y presentaciones en diapositivas, a veces explicadas y otras veces, no. Esto presupone un nuevo desafío para los estudiantes, quienes al ser aislados del espacio físico de aprendizaje (que era el aula), se encuentra en este nuevo escenario, en donde lo tecnológico dejó de ser exclusivo para el entretenimiento y ahora forma parte de su esfera académica. Incluso el uso de las plataformas virtuales o herramientas audiovisuales no se habían implementado completamente en todas las facultades sino hasta hace unos pocos meses, algo que me sorprende en pleno 2020.

La falta de solidaridad, la ausencia de un estado, el estancamiento de la enseñanza que se niega a acoplarse con las nuevas tecnologías ha llegado a perjudicar a las nuevas generaciones que son los que continuarán construyendo al país. Un cambio se necesita ahora; la empatía, la inversión en la educación y la constante capacitación de los docentes son imprescindibles si queremos avanzar como Nación.

Por: Paula Agustina Rojas

Año de Cursada: 2° Año

Carrera: Licenciatura en Ciencias de la Comunicación