Repatriados: Denuncian que un aislado dio positivo y nunca lo trasladaron a aislamiento

Una salteña que se encuentra aislada en un hotel cumpliendo cuarentena, denunció las irregularidades que se habrían generado en los protocolos de actuación, luego que otro salteño alojado en dicho hotel habría dado positivo, no se lo llevaron del lugar y hasta ahora estuvo conviviendo con ellos en el edificio.

Estefanía es la joven que se comunicó con InformateSalta para dar cuenta de la situación: ella llegó a Salta el pasado 28 de junio y se alojó en Casa Magno junto con una compañera en una habitación que pagan a diario, mientras que en otra pieza habían dos personas.

Durante el aislamiento, si bien cada uno permaneció en su habitación, estuvieron compartiendo una cocina como espacio común, cruzándose eventualmente en el ir y venir a la misma. Al día 13 de resguardo les practicaron el hisopado y al día 15 les comunican que una de las personas de la otra habitación había dado positivo, mientras que los otros tres fueron negativos.

“En ese momento nos dicen que debíamos quedarnos unos días más por cuestión preventiva y que la persona positiva iba a ir a un centro de aislamiento ese mismo domingo a la tarde”, indicó Estefanía. Sin embargo, pasó el domingo, pasó el lunes y no lo llevaron a ningún lado.

“Nos comunicamos con el COE de Salta y nos dijeron que el hotel nunca había activado el protocolo, pero luego de eso, tampoco nos dieron más respuestas”, dijo la chica quien luego comentó que “el doctor encargado del hotel, Dr. Guitián, nos dice que él no tiene por poder de decisión y quien decide definitivamente qué sucede es el encargado del Hospital Papa Francisco; sin embargo pedimos reiteradas veces que nos comuniquen con el doctor para darnos respuestas de porqué el caso positivo no es aislado y seguimos acumulando días a pagar”.

Según agregó, ante la falta de actuaciones, el caso positivo resolvió pagar una suma importante de dinero para realizarse un hisopado privado, cuyo resultado le arrojó negativo.

Con toda esta incertidumbre, recalcó en la preocupación que atraviesan de haber estado conviviendo y compartiendo espacio con una persona cuya situación epidemiológica no quedó aclarada del todo, solicitando certeza en cuanto a su situación sanitaria. “Nuestra preocupación explotó, nos sentimos expuestas, tenemos familias de riesgo en casa y no nos queremos arriesgar a salir sin un nuevo hisopado”, reclamó.

Por esto, tanto ella como su compañera decidieron autoencerrarse en la pieza, por miedo al contagio y a la espera de una respuesta sobre su situación. “No queremos salir, estamos con té y galletitas, sin tener la certeza si somos negativas o no”, concluyó.