Aprende a ahorrar desde ya y tendrás un futuro mejor

A las personas previsivas siempre les va bien porque se anteponen y preparan las cosas que podrían suceder para resolverlas eficientemente. Así son quienes ahorran y guardan siempre un poco para tener reservados algunos recursos que puedan servir para afrontar cualquier contingencia futura.

Ahorrar es prevenir, es resguardar el futuro, es una manera responsable de asegurarse un mejor porvenir, razones más que suficientes para empezar desde ya, si es que aún no has empezado.

Para ahorrar hay que tener disciplina, tratar de adquirir esta costumbre como un hábito que, como todo, puede ser difícil al principio; pero con constancia y voluntad, pronto se convertirá en una rutina cómoda y muy placentera.

Hay páginas y portales web como deudasargentina.com, que ayudan a desenvolverse mejor en el mundo de las finanzas, y en las que la palabra ahorro es recurrente, por los grandes beneficios que puede aportar a la economía personal y familiar.

En este sitio web ofrecen muy buenos consejos para ahorrar efectivamente, pero no servirán de nada si la persona que los toma no tiene voluntad y se deja vencer por la tentación de realizar gastos superfluos e innecesarios con esos recursos que tanto cuestan guardar.

La disciplina es la clave del ahorro. Si religiosamente se establece una cantidad fija para ahorrar, la misma debe cumplirse pase lo que pase, a menos por supuesto que se presente algún inconveniente o emergencia.

Consejos útiles para ahorrar

Siguiendo algunos sencillos consejos se puede ahorrar eficientemente, algunas recomendaciones son las siguientes:

• Establecer objetivos claros de ahorro: hay que ponerse objetivos realizables, tampoco se debe establecer como meta comprar un coche último modelo de alta gama en un año, cuando se tiene un salario modesto. Lo correcto es poner metas realizables, que con constancia se puedan cumplir, como por ejemplo ahorrar durante tres años para lograr el 20% de la cuota inicial para comprar esa casa deseada.
• Eliminar deudas: si se tienen deudas, lo mejor es salir de ellas, sobre todo cuando éstas generan intereses.
• Hazte pagos a ti mismo como si los debieras: siempre se debe establecer una cifra fija para ahorrar y pasarla a una cuenta distinta a la que se usa para recibir los pagos de la nómina. Es como pagar una deuda, pero con la diferencia que sirve para ahorrar.
• Dejar de fumar, beber y comer en la calle: son gastos que fácilmente se pueden evitar y que generan un gran ahorro. Intenta cada mes dejar de consumir algunos productos que habitualmente sueles comprar y que realmente no son necesarios, y fíjate cómo quedan los recursos que antes no tenías.
• Ir de vacaciones cerca de casa: habitualmente las vacaciones implican viajes largos, incluso a otros países, que por supuesto generan onerosos gastos. El turismo también se puede hacer cerca del lugar de residencia y se puede disfrutar igual con mucho menos dinero.
• Gastar para ahorrar: suena contradictorio pero es así, en especial en relación con las inversiones que se deben hacer en el hogar para optimizar el uso de la energía eléctrica. Lo cual incluye la adquisición de equipos altamente eficientes, sellado de puertas y ventanas para evitar las fugas de aire acondicionado, y demás trabajos que pueden ayudar a aprovechar mejor el consumo energético.
• Llevar el almuerzo de tu casa: es muy común almorzar en el bar o restaurante que esté frente al edificio de la oficina, con el consecuente gasto diario, que al sumarse al mes puede ser una gran cantidad. Lo recomendable es llevar el almuerzo preparado desde casa y seguro que ahorrarás unos significativos recursos.
• Ahorrar en cuentas especiales que generen más intereses: como el plan es ahorrar sin tocar los recursos destinados a ello, se pueden entonces colocar en cuentas especiales que generen más intereses que una cuenta de ahorro normal. Los bancos tienen muy buenas opciones en este aspecto.

Todos estos consejos que se pueden encontrar en el sitio web antes indicado, pueden servir perfectamente como soluciones para poder ahorrar de forma más rentable día a día.