Justicia Por: InformateSalta12/09/2021

No pudieron hacer la autopsia del bebé abortado en Tartagal y piden el ADN de sus restos

El caso de la interrupción del embarazo de más de 22 semanas que tuvo lugar en el hospital Perón de Tartagal el pasado 24 de agosto, continúa sumando capítulos en su investigación. 

En este caso, el fiscal de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal, Gonzalo Vega había solicitado una autopsia de los restos del feto para determinar si nació con vida, o si condice con lo que asegura el gerente del nosocomio, quien manifestó que el bebé “nació muerto”.  

Según indica El Tribuno, la trabajadora social del Hospital Juan Domingo Perón aseguró que los restos del feto se encontraban en la morgue del hospital, sin embargo, lo que el nosocomio entregó a la justicia son solo restos óseos.  

Vega comentó ante el diario local que solicitaron los restos “para la realización de una autopsia a fin de conocer las causas y el momento de muerte, pero nos entregaron restos esqueléticos que enviamos al CIF de Orán. Al no poder determinar nada por tratarse solo de huesos, los envió a la anatomopatóloga en Salta, quien tampoco pudo dar precisiones solicitadas por falta de vísceras y órganos para estudiar”, marcó el fiscal.  


“Solicité el ADN de los restos óseos para saber si realmente se corresponden con la madre, es decir, para saber si se trata de la hija de la mujer que reclama ante la Justicia que su bebé nació con vida"


En este punto, podríamos indagar respecto a si es posible o no que en dos semanas el avance de la descomposición arroje solo restos óseos. Más allá de este factor que deberá ser estudiado por los médicos forenses, la joven que solicitó el aborto dijo que el cuerpo fue desechado como residuo patológico, de ser así ese material se incinera a diario. Entonces, ¿serán los restos de la beba?