Tras la derrota, Nación reconvertiría planes sociales en empleos formales como medida post-Paso
Luego del duro revés que el oficialismo tuvo en las PASO, se aguardan las medidas que el Gobierno Nacional tomaría para tratar de revertir la derrota que sufrió en las urnas y tratar de sumar votos de cara a los comicios nacionales del próximo 14 de noviembre.
Una de esas medidas se lanzaría la semana que viene, cuando el Gobierno anuncie un plan el plan federal de reemplazo de planes sociales por empleo formal en varios sectores de la economía, según lo que anticipa el diario Ámbito.
El anuncio apuntará a suprimir un argumento opositor que martilla contra el peronismo por la persistencia de los programas de asistencia social, como también buscará una señal hacia los movimientos piqueteros afines que demandan la reconversión de la ayuda social en soluciones de largo aliento.
El acto de presentación se prepara para la semana que viene en una provincia, con Córdoba y Tucumán como principales candidatas. Entre los hitos a los que se apunta se incluye al rubro gastronómico con un detrás político al ser el gremio principal conducido por Luis Barrionuevo, enemigo principal del kirchnerismo en el arco sindical.
Para todas las actividades contempladas en el programa la premisa será la misma: capacitación a beneficiarios de planes sociales en oficios de albañilería, atención en restaurantes y hoteles y conexión de redes de agua y saneamiento, y transferencia a empleos formales en sendas actividades. El salario a percibir de arranque por parte de los nuevos empleados será el valor de un plan Potenciar Trabajo (equivalente a la mitad de un sueldo mínimo, vital y móvil) a cargo del Estado, y la diferencia con el básico de cada convenio colectivo por parte de cada empleador.}
El siguiente paso para la reconversión de planes en empleo se concentrará en la construcción, uno de los sectores que primero sufre las crisis y también acusa recibo de las recuperaciones económicas, y que es más dinámico en la multiplicación de puestos laborales. Gerardo Martínez, jefe de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), es uno de los negociadores del programa.
Su sector registró una merma de al menos 70 mil operarios entre el parate de la actividad por la caída económica que representó el gobierno de Mauricio Macri y el derrumbe de la obra privada durante la pandemia. El programa contendrá tanto obra pública como privada, dijeron los funcionarios a cargo del diseño, y participarán del lanzamiento directivos de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco).