Condenaron a 3 hombres que asesinaron a un joven en Cerrillos
En un procedimiento abreviado llevado a cabo en la Sala VII del Tribunal de Juicio, Néstor Martín Campero (44), alias “Negro”, fue condenado a la pena de once años de prisión efectiva como autor del delito de homicidio simple, en perjuicio de Luis Miguel Aguirre. El juez Francisco Mascarello ordenó su traslado a la Unidad Carcelaria 1.
En el mismo fallo, Rubén Darío Gatti (34), alias “Moncada”, fue condenado como partícipe secundario de homicidio simple a la pena de cinco años y seis meses de prisión efectiva. El imputado fue declarado reincidente. El imputado también cumplirá condena en la cárcel penitenciaria local.
Por último, Miguel Ángel Ocampo (52), alias “Manicero”, resultó condenado a dos años de prisión condicional como partícipe secundario del delito de lesiones graves. El juez ordenó la libertad del acusado y le dictó una serie de reglas de conducta que deberá cumplir durante tres años. Entre ellas, mantenerse alejado de los familiares de la víctima en un radio de 300 metros; abstenerse de establecer cualquier tipo de contacto y de ejercer actos de violencia contra el grupo familiar de la víctima y contra testigos; someterse a tratamiento psicológico para el manejo de sus impulsos, entre otras obligaciones.
Los tres sujetos participaron en un hecho ocurrido el 6 de septiembre de 2020, en barrio Los Paraísos. Esa noche, los acusados irrumpieron violentamente al domicilio de O. R. Golpearon al dueño de casa y lesionaron con arma blanca a Luis Miguel Aguirre, que se encontraba dentro del inmueble. La víctima recibió estocadas en el tórax. Fue trasladado en código rojo al hospital, donde falleció.
Según consta en la causa, los tres imputados actuaron de manera premeditada para poner fin a la vida de Aguirre. Esa misma tarde, Campero inició una discusión en la vía pública con O. R. y Aguirre intervino en su defensa. Luego se inició una gresca entre el imputado y la víctima, que duró unos minutos.
Más tarde, O. R. salió de su casa junto a Aguirre rumbo a la sandwichería y fueron interceptados por Campero, quien intentó atropellarlos y les advirtió que volvería. Cuando O. R. y Aguirre regresaron al inmueble del primero, se produjo la irrupción violenta de los tres imputados. Ocampo se quedó en la puerta, vigilando. Gatti le dio un golpe en la cabeza a O. R., dejándolo inconsciente en el piso. Campero atacó a Aguirre, lesionándolo con un cuchillo en zonas vitales.