Exitoso operativo de ablación multiorgánico: “Hice lo que ella quería, salvar vidas”
Durante las primeras horas de la madrugada, se realizó un nuevo operativo de ablación de órganos en el Hospital San Bernardo que beneficiará al menos a tres personas que estaban en lista de espera por trasplantes.
Se trata de una mujer de 42 años, que sufrió muerte cerebral tras un accidente ocurrido el pasado jueves en la localidad de Cafayate.
Según se informó, en principio se extraerían hígado, corazón, riñones y córneas, los dos primeros serían enviados a la ciudad de Buenos Aires.
Con lágrimas en los ojos, Ricardo, esposo de Patricia, la mujer fallecida, explicó que “ella era una mujer tan grande de corazón y tan buena que siempre dijo que su idea era donar sus órganos”. “No hace mucho tiempo me recalcó de nuevo que quería donar sus órganos, era como si ella hubiese sabido que le iba a pasar esto, me dijo, si a mi no me sirven, le sirve a otras personas".
"Yo hice lo que ella quería, salvar vidas”
Sobre el accidente, indicó que ocurrió el jueves 24 de marzo, a las 21.20 horas, mientras circulaban en moto. “Nosotros cruzamos la calle, y sentimos un impacto de atrás, caímos y no me acuerdo más nada, fue un momento horrible, me levanté fui a verla y ya no tenía vida, fue un golpe fuerte, y la cabeza dio en el cordón”, contó Ricardo.
También contó que tres hijos quedaron sin mamá. “Tengo un hijo varón de 18 años que está cursando la carrera de educación física, tengo otro hijo de 15 años, y mi nenita que tiene 4 años, que va a salita de 4 años, quedó una nenita chiquita que necesita mucha atención, todo es muy complicado, difícil”.
Sobre la actividad de Patricia, contó que dividía su tiempo entre el trabajo y el cuidado de sus hijos. “Se levantaba a las 7.20 sacaba a la nena, la cambiaba, y entraba a trabajar. Ahora todo se complica, pero la vamos a sacar adelante a Anita, a Santiago ya Luciano, es muy doloroso".
Pese al duro momento, encontró consuelo en que su esposa no sufrió. “Es difícil, duro, me tocó a mí, y ojalá se haga justicia, dejo para Dios todas las cosas, los doctores dicen que tuvo una muerte rápida y sin dolor, no sufrió mucho, fue el impacto y prácticamente murió al chocar la cabeza en el cordón, fue una muerte rápida y sin dolor”.
Para finalizar, señaló que era una persona de corazón muy grande. “Daba todo lo poco que tenía a veces se quedaba sin comer, su familia, su madre, su padre, sus hermanos, la apreciaban mucho, valía un montón”, concluyó.