Nacional28/03/2022

Sorpresa: ahora Lázaro Báez critica a Cristina y Máximo Kirchner, y defiende a Alberto Fernández

No son amigos, ambos se encargaron de aclarar que ese vínculo fue inexistente entre ellos, pero se conocen. Lázaro Báez y Cristina Kirchner fueron socios comerciales, tejieron durante doce años millonarios negocios y comparten más de un expediente judicial. Pero este sábado, en una radio de Río Gallegos, el ex contratista del Estado habló de la interna del gobierno y sorpresivamente, se refirió a la vicepresidenta: "no lo hubiera ido a buscar a Alberto si no le gustaba, pero eso se tendría que haber acordado hace dos años" y pidió que lo "ayuden a terminar su mandato" como "buenos demócratas que deberían ser".

Desde la propiedad en el Gran Buenos Aires donde cumple arresto domiciliario luego de haber sido condenado por el lavado de 55 millones de dólares, Báez habló más sobre la situación política actual que sobre su situación judicial. Sus críticas apuntaron a la vicepresidenta, al “personalismo actual” de la pelea del gobierno, a las decisiones que toma La Cámpora que lidera Máximo Kirchner, y sostuvo que Alicia Kirchner abandonó las ideas de Néstor Kirchner para Santa Cruz.

El silencio fue la estrategia principal del dueño de Austral Construcciones desde que en 2016 quedó detenido por lavado de dinero. Permaneció en el penal de Ezeiza hasta septiembre de 2020, cuando obtuvo el arresto domiciliario. Su lealtad indiscutida siempre fue hacia Néstor Kirchner, a quien sí definió siempre como su amigo, pero nunca realizó ningún tipo de comentario sobre la ex Presidenta, ni mucho menos sobre el diputado nacional Máximo Kirchner. Este sábado eso quedó en el pasado y sus críticas incluyeron también a la gobernadora Alicia Kirchner.

Atrás quedaron las quince operaciones de compra - venta de inmuebles, los negocios hoteleros, los fideicomisos, el terreno en condominio, los múltiples contratos con el Estado en materia de obra pública. Esta vez Lázaro no escatimó en críticas sobre la política actual y los protagonistas de la actual pelea en el gobierno.

Durante una hora y veintitrés minutos habló de manera telefónica con Patagonia al Mundo, una emisora con la que había dialogado en otra ocasión. Báez, que siempre se definió como un militante peronista, no ocultó el malestar que le genera la pelea actual que protagonizan el kirchnerismo y Alberto Fernández.

En primer lugar hizo una distinción: “Yo no hablo de albertistas ni cristinistas porque es una falta de respeto a los militantes, hay que hablar de peronismo, no se puede seguir hablando de personas”. Después habló de la postura de La Cámpora -sin nombrarla- que decidió no votar en el Congreso, el acuerdo del gobierno con el Fondo Monetario Internacional. “Al presidente se le podría haber pedido más temperamento para la negociación de un préstamos que se dio con total irregularidad”, pero “oponernos por oponernos, seguir echándonos reproches sobre lo que se pudo o no se pudo, está fuera de lugar”. Decir “yo no puedo votar porque afecta esto o aquello, va a endeudar a la clase trabajadora, eso ya está, creo que se equivocan”.

Bajo ese mismo argumento, Báez dijo que el acuerdo con el FMI “va a devolver un marco de seriedad para planificar una política económica distinta y reactivar el aparato productivo” e insistió que los reproches “ya están fuera de lugar”.

Avanzando en la charla, el ex socio comercial de Cristina habló sobre la interna profundizada tras la renuncia de Máximo Kirchner a la presidencia del bloque en diputados y la postura pública de no acompañar la decisión del Presidente respecto al FMI. “Dentro del peronismo hubo una conjunción de voluntades del Frente de Todos y los que no coincidían con esas ideas fueron por su propio camino. El peronismo tiene que dejar estas peleas internas le guste o no le guste. Estas peleas internas hacen a los egos personales y no a los objetivos que por ejemplo, Néstor tenía claros”.

En esa misma línea se refirió a la vicepresidente: “Acá no podemos estar en si Cristina es la mejor referente o si Alberto es el mejor referente. Cristina no tendría que haber ido a buscar a Alberto si no le gusta, eso se debió haber acordado antes” y recordó que Fernández tiene dos años de mandato y “como buenos demócratas que deberían ser y como todos los argentinos tratamos de vivir en democracia, debemos respetar este pedazo de historia que aún le queda transitar a Alberto y ayudarlo a terminar su mandato y luego el pueblo argentino irá a elecciones libres y elegirá lo que considere la mejor opción”.

Como no le gusta hablar de cristinismo ni albertismo, el empresario K dijo que todo debe volver a ser “peronismo, donde se tiene que generar nuevos liderazgos, el peronismo tiene que hacer una interna profunda y eso nos va a curar, seguir con esta dosis de representación personalizada, no tiene sentido”.

Ya habían transcurrido quince minutos de la conversación con la emisora santacruceña, cuando Báez habló sobre La Cámpora, dijo: “es una idea de Néstor para incluir a la juventud, y hoy La Cámpora tira a los compañeros por la ventana porque tienen un poco más de edad y esas cosas no se tienen que dar. El peronismo es una amplitud de pensamientos y de ideas para encontrar el mejor camino que al país, a la provincia, al municipio le haga bien. La política es el otro argentino, si es peronista es mejor”.

Críticas a Alicia Kirchner

Durante la charla, las críticas también alcanzaron a la actual gobernadora de Santa Cruz. “Las ideas de Néstor fueron dejadas de lado hace bastante tiempo. Si vos mirás la conducta de los gobiernos que llevó en Santa Cruz y la realidad que es hoy, te da ganas de llorar. Seguimos reclamando la aplicación de la política que fijó Néstor para la provincia que era el crecimiento, todo eso quedó de costado”.

Lázaro Báez perdió las últimas 24 obras viales que le quedaban por la firma de un decreto de Alicia Kirchner apenas asumió la gobernación a finales de 2015. Vialidad Nacional ya había detectado que esos contratos tenían ocho años de retrasos y sobrecostos que superaban el 65%. El dueño del Grupo Austral consideró que la medida de la gobernadora “no correspondía, no se podía por un decreto dar de baja los contratos”, pero fue más crítico sobre su gestión. “Cuando asumió Macri, lo primero que hizo Alicia fue entregar nuestra provincia, renunciar un poco a la política de alternativa que Néstor guardó para Santa Cruz. Nos sentimos dolidos”. /Clarín