Fernández y Guzmán anunciarán un ingreso de emergencia similar al IFE
El presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, tiene agendado para esta tarde una serie de anuncios de refuerzo de ingresos para trabajadores de bajos recursos, según confirmaron fuentes del palacio de Hacienda. Aunque los detalles de las medidas estaban siendo delineados en estas horas y mantenidos en reserva para el momento del anuncio, trascendió que el mismo rondará mejoras en los haberes de distintos sectores.
El anuncio en principio está programado para alrededor de las 18, según dijeron fuentes a Infobae. El universo de destinatarios todavía es difícil de precisar. Lo que es claro es que será mucho más limitado que el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), cuyas tres rondas en 2020 alcanzaron cada vez a cerca de 9 millones de personas.
En pasillos oficiales aclaran que la cantidad de beneficiarios será considerablemente menor. Que se busca un ingreso de emergencia para trabajadores de bajos recursos, monotributistas, empleados en negro y hasta personas que perciben el salario mínimo serían el blanco de la iniciativa.
Los anuncios tienen que ver con lo que estuvo trabajando el ministro junto a su equipo durante el fin de semana en Chapadmalal, en la costa bonaerense. “Es para mejorar los ingresos de los trabajadores”, aclararon desde cerca de Guzmán.
Se trata de una medida de emergencia activada por el Poder Ejecutivo tras conocerse el dato de inflación de marzo, de 6,7%, que marcó un récord en los últimos 20 años en términos mensuales. El Gobierno teme que la escalada inflacionaria de los últimos meses se traduzca en un desplome del poder de compra de los salarios.
Para eso, por un lado, que marcan el ritmo de los reajustes salariales en el universo laboral registrado. Por otra parte, aceptó anticipar las conversaciones con gremios de empleados públicos para buscar una recomposición de ingresos de ese sector.
Quedaba, como sector más desprotegido, la porción del mercado laboral que trabaja de manera informal. En la Casa Rosada admitían hasta hace pocas semanas que las posibilidades de conseguir un efecto positivo concreto sobre este segmento laboral es muy limitado, incluso con una actualización del salario mínimo.