Así avanza la contaminación por el Pilcomayo, tras el colapso de un dique en Bolivia
Tras la rotura de un dique de colas en la zona de Agua Dulce, Potosí, se realizan tareas de limpieza para evitar que la contaminación llegue a territorio chuquisaqueño y las aguas del río Pilcomayo.
Ese fue el informe del secretario Departamental de la Madre Tierra de la Gobernación de Potosí, Nelson Sacaca, tras el incidente. Técnicos de esa secretaría realizan el monitoreo de las aguas en el río Tarapaya antes de que las colas producto de la contaminación minera lleguen a Chuquisaca.
La mañana del sábado, uno de los taludes del dique de colas de Agua Dulce colapsó, dejando salir rumbo al río una cantidad indeterminada de material. El lodo tiene un conjunto de minerales no recuperados en ingenio, además de elementos químicos que se utilizan en el proceso de tratamiento, lo cual llegó al Río de la Rivera y fue bajando hasta el Tarapaya, que a su vez vierte sus aguas al río Pilcomayo, que pasa por territorio chuquisaqueño y sigue bajando hacia otras regiones del país y del exterior.
Ese día, el jefe de Medio Ambiente de la Alcaldía de Potosí, Juan Miguel Alemán, calificó el derrame “de gran envergadura” y remarcó “que el área de San Antonio está totalmente contaminada y afectada de sobremanera”.
La verificación del impacto en ríos y zonas de cultivo está en curso. El ingenio pertenece a la Federación Departamental de Cooperativas Mineras (Fedecomin), cuyo representante es Edgar Huallpa.
En los videos que difundió la prensa local se puede observar cómo las aguas cristalinas del Pilcomayo se tornan turbias hasta alcanzar un color plomo.
Tras el desastre, un equipo multidisciplinario compuesto por técnicos de la Gobernación de Chuquisaca y de los municipios de Yotala y Tacobamba tomaron muestras para poder determinar el grado de contaminación.