El Materno Infantil reclama paciencia tras colapsar la guardia: "No estamos tomando el té"
Una imagen que llamó la atención en la noche de este miércoles fue la gran cantidad de padres y niños en la guardia del hospital Materno Infantil quienes debieron esperar durante un buen tiempo para poder ser atendidos por los profesionales que hicieron todo lo posible para atender las patologías como urgencia, en medio del reclamo de los papás por más celeridad.
Al respecto de esta situación el doctor Federico Mangione, gerente del nosocomio capitalino, dialogó con Canal 9 Multivisión donde primeramente recordó que el Materno Infantil es “de referencia para la provincia, para las limítrofes y para los países limítrofes, es de camas calientes” ante la demanda de atenciones que reciben.
Asimismo contó que la guardia se maneja por casos verdes, amarillos y rojos, calificación que va de casos leves a moderados y graves o urgencias. Sin minimizar que todo caso es importante, Mangione aseveró que al llegar un código rojo todo el equipo de salud de guardia debe acudir a salvar esa vida. “Muchas veces pasan esos casos y nos demoramos en atender a los demás, debemos atender a estos pacientes” en urgencia, puntualizó.
En este punto el gerente hizo dos salvedades, la primera es que casi el 70% de los casos son ‘verdes’, el segundo que hay profesionales que están distribuidos en los nodos sanitarios para dar atención las 24 horas, facilitando que se atiendan cerca de sus casas y no vayan hasta el hospital.
“Pedimos un poquito de paciencia, entiendo a la gente y el dolor de cada papá, pero también deben entender que cada vez que hay una urgencia, la debemos atender”
“Entiendo a los papás que llegan con los hijos, que viajan en colectivos, pero también deben entender que somos humanos y tenemos límites; escuchaba del cansancio, todo el sistema de salud debe tener sus minutos (de descanso), porque al estar cansados el margen de error es muy grande, si decimos que atiendan 30 pacientes a la vez no es calidad, la medicina no es solo atención sino calidad”, reflexionó.
Como si fuera poco subrayó que hay faltante de profesionales, 31 jubilaciones en su área, carencia que buscan sanear junto al Gobierno de la Provincia. Ni mencionar la crisis económica que los ha dificultado con las provisiones de materiales protésicos, las demoras en las exportaciones, más cómo los presupuestos ahora deben multiplicarlos por 3 o 4.
“A veces no damos abasto, pero mi gente no está tomando el té, está atendiendo”