Absolvieron a las policías acusadas de quebrarle el brazo a una mujer
El pasado 12 de octubre, empezó el juicio contra dos policías por un hecho ocurrido en 2018, cuando una mujer sufrió una fractura producto de haber sido reducida en un procedimiento policial.
El fiscal penal de Derechos Humanos, Gabriel González, representará al Ministerio Público Fiscal ante la Sala III del Tribunal de Juicio, Distrito Judicial Centro, en la audiencia de debate contra la agente Judith Villanueva y la sargento ayudante Silvia Martínez como autoras de los delitos de lesiones graves agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público y vejaciones agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público, todo ello en concurso ideal.
Hoy finalmente se conoció que ambas quedaron absueltas por el beneficio de la duda de los delitos de lesiones graves agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público y vejaciones agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público.
El caso
Según declaró la damnificada, el hecho ocurrió el 4 de febrero de 2018 cerca de la medianoche cuando fue agredida físicamente por personal policial femenino que se encontraba prestando servicio en el local bailable “Carpa El Gaucho La Florida”, de la localidad de La Merced.
La denunciante se encontraba esperando el colectivo frente a la carpa sobre Ruta 68, cuando observó que había un incidente entre varias personas que se encontraban en el lugar y en el que intervino personal policial.
Al ver que el incidente se desplazaba hacia donde se encontraba junto a su pareja, le pidió a los efectivos que pararan. Fue entonces cuando una policía de sexo femenino le dijo que se retirara. Según relata, cuando procedían a abandonar el lugar, sintió que la tomaron del brazo izquierdo con fuerza, haciéndoselo hacia atrás, queriéndola reducir. En ese momento le propinaron un golpe de puño en el brazo desde atrás, e inmediatamente sintió un fuerte dolor.
La situación provocó a la víctima “el quiebre del brazo izquierdo (húmero por torsión), usando una fuerza desproporcionada y mayor a la requerida para la reducción de la víctima”, corroborado por el informe de Medicina Legal del Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF).