Primero fue el trencito de la alegría, ahora un jefe barrabrava golpeó al Hombre Araña

No parece ser la mejor temporada para interpretar al hombre araña, mucho menos en vehículos de fantasía dedicados a los paseos turísticos urbanos. Uno de los animadores que llevaba ese disfraz sufrió el efecto de gas pimienta que un desconocido lanzó la semana pasada sobre la unidad conocida como “Barco Pirata”, en pleno centro de Mar del Plata. Otro, con misma vestimenta, ahora fue atacado a golpes de puño por un automovilista, molesto porque un “tren de la alegría” demoraba el tránsito mientras sufrían pasajeros.

El agresor, según se supo luego de fuentes policiales, se llama Raúl Ciminelli, es reconocido como el jefe de la denominada barrabrava del Club Vélez Sarsfield y pudo ser aprehendido luego de lastimar a otras dos personas, también porque interfirieron su camino por las calles de Villa Gesell.

La fiscal Verónica Zamboni, la misma que realizó la instrucción de la causa por el crimen de Fernando Báez Sosa, se hizo cargo de este caso y dispuso imputar a Ciminelli por el delito de lesiones leves.

El estado en que estaba cuando lo identificó y retuvo una comisión policial llevaron a ordenar que se le practique un test de alcoholemia. Le dio positivo, con 1,34 gramos por litro de sangre, indicador punitivo en su condición de conductor de un automóvil.

El incidente ocurrió en la calle 4 y 110 cuando Ciminelli quedó detenido detrás de un “tren de la alegría”, siempre ruidoso, con animadores y mucha diversión a bordo. En esa esquina subían más pasajeros, en su mayoría niños, y quien los ayudaba era un adolescente con traje de hombre araña.

Fastidioso, de poca paciencia, el robusto conductor emprendió contra el frágil “hombre araña”, al que le aplicó varios golpes y le exigió que saliese de su paso para poder continuar su recorrido.

El adolescente quedó asistido por compañeros, vecinos y también algunos pasajeros, mientras Ciminelli continuó recorrido al volante de su vehículo. Unos metros más atrás se impacientó porque una camioneta no le permitía avanzar. También atacó al conductor y a un cuidacoches que intentó mediar, para calmar la situación.

La intervención policial, con efectivos que fueron testigos de esta última situación, permitieron detener al individuo y trasladarlo hasta la sede de la comisaría 1a, donde aguardará que desde la fiscalía resuelvan sobre su situación.

La semana pasada, en Mar del Plata, otro de estos vehículos de fantasía fue protagonista de un escándalo. Quienes eligieron una de las salidas del “Barco Pirata”, desde Plaza Colón, lograron ver una discusión en la vereda entre propietarios de esa unidad y otra de similares características.

Al parecer algunas diferencias, relacionadas con cuestiones de pareja, llevaron a una tensión enorme entre dos familiares que trabajan en distintos vehículos. Minutos después, con los servicios en marcha y pasajeros a bordo, se registró el episodio en “Barco Pirata”, con gas pimienta lanzado desde una ventanilla sobre el interior del colectivo. Aún hoy se desconoce quién fue el responsable de ese ataque.

Los animadores, entre ellos el “Hombre Araña”, un clásico en estos servicios, debió quitarse la máscara por la dificultad para respirar. Entre los pasajeros hubo molestias, irritación de ojos, pero ninguna consecuencia de salud que mereciera atención médica de mayores cuidados.