La damnificada presentó la denuncia contra su hermano en la subcomisaría de barrio Autódromo. Dijo que convivían en el mismo domicilio (casa de su madre fallecida) y que el acusado generaba problemas por cualquier motivo.

La mujer contó que el 8 de abril pasado, su hermano llegó al inmueble en aparente estado de ebriedad y comenzó a insultarla por haber dejado ropa tendida en la soga y porque sus hijos estaban jugando. Ella le respondió que dejara de molestarla o iba a llamar a la policía y entonces él le advirtió: “Llamá y vas a ver, te voy a cortar el cuello a vos y a tus hijos”.

Posteriormente la agredió con un golpe de puño en la cara. Ella cayó al suelo y él siguió atacándola. Ante esto, los hijos menores de la damnificada (11 y 9 años) acudieron en su ayuda pegándole a su tío con un palo en la espalda. El acusado reaccionó golpeando también a los niños.

La denunciante se comunicó con el Sistema de Emergencia 911 y el acusado fue demorado.

El Juicio 

Denunciado e imputado por  los delitos de coacción, lesiones leves agravadas por el género y lesiones leves, todo en concurso real, Jorge Alfredo Martínez (41) fue llevado a juicio y  condenado a 2 años de prisión condicional. 

Además el juez Francisco Mascarello, vocal de la Sala VII del Tribunal de Juicio, dispuso la libertad del condenado por la modalidad de la pena dictada y le ordenó cumplir reglas de conducta durante dos años.

Entre ellas, abstenerse de consumir bebidas alcohólicas o estupefacientes; someterse a tratamiento psicológico orientado a la violencia de género y violencia familiar; prohibición de acercamiento a 300 metros de la denunciante y de su grupo familiar; prohibición de ejercer actos de violencia física y psíquica en su contra; prohibición de contactarse con la damnificada y su grupo familiar por cualquier medio (telefónico, mail, whatsapp, redes sociales, directa o indirectamente); realizar tratamiento por sus adicciones previo dictamen de un profesional que así lo disponga y presentar las constancias pertinentes.

El juez ordenó además que se implante consigna policial fija por el término de diez días en el domicilio de la denunciante, y consigna ambulatoria por quince días más. Asimismo, dispuso que el Sistema de Emergencias 911 instale un botón antipático en el teléfono celular de la víctima.