Empresas19/07/2023

El impacto del cambio climático en la agricultura argentina

El cambio climático ya no es una novedad. Desde hace varios años se advierte sobre los impactos que puede tener en distintos ámbitos en el mundo, y se toman medidas para evitar que siga avanzando.

Cuidar más el medioambiente para detener el avance del cambio climático, es uno de los pilares fundamentales para evitar grandes catástrofes. Las noticias del campo indican que en la agricultura argentina, el cambio climático impacta a través de la sequía o las altas temperaturas.

En sitios como portal agro se pueden encontrar muchos artículos respecto a lo que sucede día a día con la agricultura argentina, cuáles son los posibles riesgos que traen consigo el cambio climático y qué hacer para evitar la mayor cantidad de daños posibles.

Medioambiente y economía

El sector agrícola de Argentina es uno de los sectores más importantes para la economía del país. Además, este sector depende en una gran parte de las condiciones climáticas y del medioambiente para poder desarrollarse.

La gran sequía que se vivió en los últimos años es muestra de ello. La última temporada pluvial en el país fue la más baja registrada en medio siglo, impactando directamente en la producción de distintos cultivos como soja y trigo.

Estas regiones agrícolas del centro del país que actualmente sufrieron las consecuencias de una gran e impactante sequía, hace tan solo algunos años atrás habían padecido grandes inundaciones.

El gran cambio y variabilidad que imprime el cambio climático a nivel mundial es realmente devastador. Es necesario tener en cuenta todo lo que sucede en el país para poder evaluar cómo continuar con la actividad agrícola.

Los fenómenos naturales que se dan en nuestro país desde hace cientos de años como El Niño o La Niña (el primero asociado a importantes precipitaciones y el segundo a épocas de sequía), se dan cada vez con más frecuencia, afectando a todos los cultivos de la región pampeana.

Cómo actuar

No es fácil poder anticipar lo que va a suceder con el clima y actuar en consecuencia. Muchas empresas agrícolas consideran que es fundamental priorizar a los cultivos más resistentes, para evitar grandes daños debido al cambio climático.

El estrés hídrico que padeció el país los últimos años con las sequías, demostró que el único cultivo que pudo finalizar su ciclo con saldo positivo fue el girasol, así como también el arroz es el cultivo que más tolerancia tiene a las inundaciones.

Muchos de los especialistas coinciden en un aspecto: dar mayor importancia al cambio climático en relación a las decisiones que se toman en el sector agrícola, para poder optimizar los recursos y evitar grandes pérdidas.

Entre estas decisiones, se encuentra la de priorizar a los cultivos que presentan mayor resistencia frente a los distintos cambios producidos en la región, como el estrés hídrico y las inundaciones.

Todo pareciera indicar que la agricultura sostenible es un paso hacia el futuro. Tener en cuenta el cambio climático y las distintas opciones que ofrece la agricultura sostenible son en este momento dos pilares fuertes en la agricultura argentina.

Argentina, país líder en producción de alimentos

Argentina es un país líder en producción de alimentos a nivel mundial, gracias a sus condiciones geográficas entre las que se destacan la abundante cantidad de tierra fértil y los importantes recursos hídricos.

El impacto que podría sufrir Argentina en un futuro debido al cambio climático, si no se encuentran soluciones con anticipación, podría incluir:

●       pérdidas sistémicas del PBI, que podrían llegar a ser de hasta 2,8%; 

●       impacto en la economía general, ya que el 47% de la tierra se utiliza para la agricultura y esta produce el 7% del PBI;

●       reducción de los ingresos netos entre un 20% y un 50% debido al aumento de temperaturas medias;

●       aumento del rendimiento de cultivos de trigo y maíz, dos de los cultivos que mejor resisten a las altas temperaturas;

●       disminuciones en la producción de trigo;

●       rendimientos más bajos de los cultivos y peor calidad en los alimentos, debido a incremento en las temperaturas, disminución de precipitaciones, intensificación de eventos extremos, entre otros.

Qué pasa con el aumento de temperatura

El aumento general de temperatura que se experimenta a nivel mundial, y por supuesto impacta también en Argentina, produce diferentes efectos en la actividad agrícola.

Frente al aumento de las temperaturas en las distintas regiones del país, los cultivos modifican la duración de cada temporada, de desplazan las zonas de cultivo hacia regiones más favorables, entre otros cambios.

El impacto del cambio climático no se puede evaluar de igual manera en cada región, ya que de acuerdo a la zona geográfica y los cultivos que se desarrollen allí, puede variar. Por eso, es necesario analizar el impacto de acuerdo a cada cultivo en particular.

El impacto en el maíz

En el caso del maíz, se espera que debido a las condiciones que impone el cambio climático, disminuya su rendimiento en todas las regiones del país, excepto en las zonas centrales costeras, ya que allí se mantienen constantes las precipitaciones durante la temporada de cultivo.

El impacto en la soja

La soja es un cultivo especial respecto a su comportamiento frente al cambio climático. De hecho, es uno de los cultivos que podría verse beneficiado con este escenario, ya que podría aumentar su productividad hasta un 10% debido a los aumentos en las precipitaciones.

El impacto en el trigo

Al igual que el maíz, el trigo experimentará diversas alteraciones de acuerdo a la zona del país en donde se cultive. En la región pampeana podrá presentar incrementos en su rendimiento, mientras que fuera de esta zona su rendimiento será menor.

Impacto en los viñedos

Finalmente, el impacto del cambio climático en los viñedos afectará no solo el rendimiento, sino también en la calidad de las uvas. De acuerdo con algunos estudios realizados, será necesario trasladar las regiones vinícolas a regiones más frías.

El cambio climático es un problema que preocupa al mundo entero. Ahora es cuando es necesario actuar para detener su avance y evitar un alto impacto negativo en la agricultura del país.