Inseguridad en el macrocentro: "Es insostenible, tenemos mucho miedo"
La inseguridad en Salta parece no dar tregua. Ahora, a muy pocas cuadras (exactamente a 3) del edificio central del Sistema de Emergencias 911 y del Ministerio de Seguridad, delincuentes roban como si nada, y nadie los detiene.
El primer gran robo fue registrado a un comercio de la zona, y según contó el dueño por Radio CNN Salta 94.7 MHz, todo ocurrió a 4:30 de la madrugada. “A las 4:45 me llamaron del sistema de seguridad para decirme que habían roto la puerta y robaron bicicletas”, relató.
Dijo que logró recuperar una bicicleta gracias a una persona que justo circulaba por la esquina, inició una persecución en su vehículo particular y logró que un delincuente abandone el rodado.
La mayor cantidad de hechos delictivos estos días se registraron entonces en calles Necochea, Pueyrredón, Vicente López y O’Higgins. “Se torna cada vez más difícil”, agregó el hombre y dijo que entre vecinos y comerciantes de la zona hablaron para pagar seguridad privada durante la noche “porque ya es insostenible”.
Confirmó que a pesar de la gran difusión que está teniendo el tema y de la cantidad de denuncias radicadas, las autoridades de seguridad no se acercaron ni tomaron cartas en el asunto.
“Es una perdida grande económicamente, pero más allá de eso, es la invasión. Entran, sacan y se van, está todo premeditado”
Otra mujer, que tiene un hostal en la zona, contó que los últimos días, a un turista, le sacaron con facilidad la batería de su vehículo. “Siempre están robando algo. Nos descuidamos acá 5 minutos, entraron y robaron el celular del hostal”, dijo.
Sostuvo que fueron a realizar la denuncia, pero la toman y hasta el día de hoy no tienen respuesta alguna. “Ya conocen la zona, saben que la gente no hace nada, porque nosotros los vecinos tendríamos que hacer algo, pero tampoco la Policía hace”, relató.
Por último, una vecina que vive en el edificio al que entraron a robar durante la semana pasada, relató al mismo medio que la situación es compleja y empeoró notablemente las últimas semanas.
“Hay una gran cantidad de robos. Es algo que no pasaba antes o no era tan notable y tan seguido. La semana pasada ingresó al edificio una pareja que quedó captada por las cámaras de seguridad. Un hombre que utiliza gorra o capucha, intentaron sustraer bicicletas, entre otras cosas”, contó.
Agregó que a partir de esto se han realizado denuncias correspondientes, pero no hay más presencia policial. “Queremos llegar hasta las últimas consecuencias, pero no nos ayuda la Policía. Tenemos temor de entrar y que haya alguien o salir y que alguien nos esté esperando”, finalizó.