Empleado municipal violó a su hijastra y le contagió una enfermedad venérea
El acusado tiene 36 años y abusó también de una prima de su hijastra, hechos por los que fue condenado a 9 años de prisión. Todo se descubrió cuando una tía llevó a un centro médico a la menor, quien había contraído sífilis.
El juez Marcelo Rubio, vocal de la Sala V del Tribunal de Juicio, condenó ayer a un empleado municipal de 36 años, a la pena de 9 años de prisión en el penal de Villa Las Rosas. La condena responde a los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda (dos hechos), cometidos en perjuicio de su hijastra de 12 años y de una prima de la misma, también menor.
En la audiencia de juicio, la fiscalía expuso detalles del caso, el cual se registró el 22 de octubre de 2022, fecha en que el imputado accedió sexualmente de la hija de 12 años de su pareja, hecho cometido por la fuerza y aprovechándose de la débil resistencia de la pequeña.
Concretado el abuso, el acusado avanzó con una prima de su hijastra, a quien ya había sometido a tocamientos impúdicos, modalidad utilizada con la primera víctima, la que fue amedrentada para que no revelara nada respecto a los abusos.
Aunque la menor, atemorizada, no dijo nada, otro suceso dejó al descubierto al abusador. Resulta que, a los días, la niña comenzó a evidenciar síntomas de fiebre y tos, por lo que, en un principio, se creyó que podría deberse a un cuadro de gripe, sin embargo, ese cuadro quedó descartado cuando la menor reveló que también le picaba mucho la zona vaginal.
La menor reveló lo que padecía en la casa de una tía, quien, ante los síntomas mencionados, le pidió a su sobrina que le permitiera revisar sus partes íntimas a fin de corroborar la picazón, pero la víctima, por pudor o temor, se negó a ello.
Posteriormente, sin embargo, la tía recibió de su hija unas fotos del sector que la víctima tenía enrojecido, lo que llevó a intervenir de manera más firme. En primer lugar, trasladó a la menor hasta el hospital Materno Infantil, donde los médicos examinaron a la menor.
Con antecedentes
En tanto, la tía dio a viso al progenitor de la menor, quien se hizo presente en el centro médico, donde sugirió que su hija podría haber sido víctima de la nueva pareja de su mujer, pues sabía que el mismo cuenta con antecedentes penales.
Los médicos, por su parte, confirmaron que la menor presentaba un cuadro de contagio de una enfermedad venérea, en este caso de sífilis, la que se contrae por transmisión sexual, situación que luego fue confirmada por la víctima, quien señaló a su padrastro como el responsable.
Esto no fue todo, pues también reveló que el acusado había abusado de la hija de la denuncia, aunque no llegó a accederla sexualmente, sino que le tocó sus partes íntimas. Ante ello, la tía radicó la denuncia, la que quedó en manos del fiscal penal Federico Obeid.
El empleado municipal reconoció haber cometido ambos hechos a la vez que también prestó conformidad a la pena acordada entre su defensa y la fiscalía
La investigación posterior confirmó la responsabilidad del empleado municipal, quien, en la audiencia de debate, en el marco de un proceso de juicio abreviado, reconoció haber cometido ambos hechos, a la vez que también prestó conformidad a la pena acordada entre su defensa y la fiscalía.
Lo mismo hizo la asesora de menores e incapaces que intervino en representación de los derechos de las víctimas. La funcionaria judicial coincidió con la fiscalía en la responsabilidad probada del acusado, como así también con la pena de nueve años propuesta.
Cumplidos los pasos procesales, el juez dio por homologado el acuerdo y condenó al empleado municipal, domiciliado en barrio Solidaridad, a cumplir la pena en el Penal de Villa Las Rosas y que, a lo largo de la condena, sea sometido a un tratamiento psicológico.