Gobierno09/08/2024

"Deberí­a ir preso": el Gobierno reacciona tras revelación de fotos de la expareja de Alberto Fernández

Continúan las repercusiones tras la denuncia realizada por la periodista Fabiola Yáñez contra Alberto Fernández. Han salido a la luz imágenes que muestran agresiones fí­sicas, así­ como una serie de mensajes en WhatsApp, donde la ex primera dama expone varios hechos de maltrato.

Según la información recogida por este medio, las fotos fueron enviadas por Yáñez a Fernández en el marco de conversaciones de WhatsApp, en las que ella le reprocha a su entonces pareja su actitud violenta.

La aparición de estas fotografí­as generó fuerte reacción entre los polí­ticos; entre ellos, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, quien escribió un breví­simo texto: "Señores: nunca más. Fin".

También el ministro de Defensa, Luis Petri, se refirió al caso y afirmó que "deberí­a ir preso ya como otros violentos con prisión preventiva", mientras que varios integrantes de La Libertad Avanza, el partido de ultraderecha con el que el presidente, Javier Milei, llegó a la Presidencia, difundieron las fotos en redes o abundaron en la idea de que Fernández vaya a prisión.

Casi en simultáneo con la publicación de las fotografí­as, empezó a circular en los medios argentinos y en las redes un video grabado supuestamente en la Casa Rosada (sede del Gobierno argentino).

En él se ve a una mujer, Tamara Pettinato, colaboradora de distintos medios de comunicación, tomando cerveza y hablando en un tono de gran confianza presuntamente con el entonces mandatario, al que sólo se le escucha en 'off'.

Argentina asiste al peor momento de Alberto Fernández, quien hace casi ocho meses salió de la Presidencia de Argentina tras cuatro años de mandato (2019-2023).

Después de las innumerables crí­ticas recibidas por su gestión, sobre todo de su sucesor, por la "herencia recibida", y del escándalo desatado en 2020 por la filtración de fotos del festejo del cumpleaños de Yáñez con amigos en la residencia presidencial mientras el paí­s viví­a en pleno confinamiento, el polí­tico peronista se enfrenta a un capí­tulo mucho más oscuro.