Por no pagarle a un “cuidacoches” de La Balcarce, le orinaron el auto

El corredor turístico de La Balcarce se convirtió en escenario de un violento incidente callejero el jueves pasado, cuando un vecino de la zona junto a su familia decidieron estacionarse en calle Alsina, entre las calles Balcarce y Mitre.

Claudio Heredia, el denunciante de este incidente, sostuvo en la Comisaría Primera que apenas estacionó su vehículo, un Chevrolet Astra, se le acercó un cobrador de estacionamiento y le exigió el pago por estacionar en el lugar y cuidarle el coche, exigencia que el automovilista se negó a pagar.Heredia le explicó al “cuidacoche” que en realidad él vivía en esa cuadra, por lo que por su condición de vecino de la zona no le correspondía pagarle nada. El “cuidacoche”, sin embargo, no aceptó lo afirmado por el conductor e insistió que cobrar cierto dinero, pues no creía que residía en esa cuadra.

Ante la firme postura del automovilista y vecino, el “cuidacoches” cambió el tono de sus palabras y con un cerrado acento amenazante le dijo: “No queres que te lo cuide al auto entonces, ¿estás seguro?”, respondió el cobrador.

Lejos de quedarse a convencer al “cuidacoche”, Heredia ingresó a su domicilio junto a sus familiares, dejó las pertenencias que cargaban y se fueron a cenar a un restaurante de la zona, circunstancias en que su automóvil quedó en el lugar.

Pasadas unas horas, ya en la madrugada, Heredia regresó para echarle una mirada a su automóvil, momentos en que advirtió que la puerta delantera del automóvil, del lado del conductor, estaba totalmente orinada, en especial la manija de acceso al rodado.

Ante semejante cuadro, Heredia fue en busca del “cuidacoches” que minutos antes había intentado hacerlo paga por velar por su rodado. Al interrogarlo, el cobrador sostuvo que desconocía qué había sucedido con su automóvil, pues él había pedido que no lo cuidara.

Como era de esperar, el “cuidacoche” reiteró que no pudo ver qué habían hecho en su rodado, razón por la cual Heredia al ver que la discusión era inútil decidió llevar su rodado a otro sector, pero al regresar observó que el supuesto cobrador se burlaba de cómo había quedado su auto.

La situación generó un nuevo reclamo de parte de Heredia, instancia en que ambas personas se fueron a los golpes, sin que ninguno de los dos luego denunciara la agresión ni tampoco aceptaron ser asistidos por las lesiones que sufrieron en la gresca.

No obstante, Heredia sí denunció a la mafia de los “cuidacoches” que opera en La Balcarce, pues aquellos visitantes que llegan al corredor y se niegan a pagarles son blancos de ataques de todo tipo, como lo sucedido con su coche.
 

Fuente: www.informatesalta.com.ar