Catalano sería el reemplazante de Posadas en la Corte
En días, la Corte de Justicia deberá elegir sus autoridades. Guillermo Posadas, actual presidente, fue quien comenzó un proceso de transformación y modernización, pero se vienen nuevos desafíos.
Editorial de ayer de FM Aries:
Tras dieciséis años, otro juez ocupará la presidencia de la Corte de Justicia. Reemplazará a Guillermo Posadas, uno de los titulares más longevo en esas funciones y duplicó la permanencia de su antecesor, el abogado Rodolfo Urtubey.
Precisamente la alternancia no parece ser una gran preocupación en el Poder Judicial. La virtud republicana que más se pondera en ese sector es el de la división de poderes, cuestión que no le queda muy clara a la ciudadanía, que observa una fuerte dependencia política con el Ejecutivo provincial.
También se respeta a rajatablas la duración de mandatos, la tercera característica esencial de un sistema de gobierno equilibrado. Es así que el próximo turno de mandato se inaugurará el 10 de diciembre, con Guillermo Catalano a la cabeza, cuando caduca el mandato de Posadas.El actual presidente se integró como juez a la Corte en 1.995 y en 1.999 fue elegido presidente por sus pares. Desde ese año preside el Tribunal Electoral de la Provincia, el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados y el Tribunal de Superintendencia del Notariado.
En este último tramo de su presidencia le tocó pilotear procesos de cambio sustanciales en el ámbito judicial, como la aplicación de un nuevo Código Procesal Penal y la puesta en marcha de fiscalías y juzgados vinculados a la violencia de género. Pero especialmente, Posadas navegó en las turbulentas aguas –aún no aplacadas- de la renovación del elenco de magistrados y funcionarios, que en masa abandonaron sus despachos cuando se dispuso aplicar el 82% móvil a las jubilaciones.
Su sucesor también deberá demostrar habilidad de timonel porque debe avanzar el proceso de elaboración y aplicación de un nuevo Código Procesal Civil y Comercial, para adecuar a la justicia provincial a la nueva normativa vigente en la materia. Otra reforma significativa es la de la ley de responsabilidad del Estado y de los funcionarios.
El presupuesto requerido para 2016, de hecho año de arranque de la nueva gestión, se acerca a los 2 mil millones de pesos, cifra que casi duplica al actualmente vigente. Se justifica en que deben crearse nuevos juzgados, la habilitación de la Oficina de Gestión de Audiencia y la instalación de paneles solares para sustituir paulatinamente la energía convencional en la Ciudad Judicial.
La tarea no es sencilla, no sólo en orden administrativo. Van por los cinco años de realización las marchas de Familiares contra la Impunidad, una presencia que corporizó la morosidad de la Justicia. Esa denuncia, que estaba reducida al estrecho círculo de abogados y ciudadanos judicializados, se reitera cada viernes recordando que no hay Justicia si llega tarde o aparenta no actuar con los ojos vendados.
Administrar justicia es tarea compleja y políticamente superior. Y sus conductores no son elegidos sino designados. No es un dato menor.
Fuente: FM Aries