Cupo femenino: “Las mujeres no vamos por atrás de los hombres, sino a la par”

Con un amplio apoyo, el proyecto presentado por la diputada Francisca Jiménez contó con media sanción en la Cámara de Diputados. El proyecto que presenta Jiménez busca modificar la participación femenina en ciertos circuitos políticos, haciendo posible que el número de mujeres sea equivalente al número de hombres que ocupan cargos en estos ámbitos.

El proyecto para la modificación del Artículo 38 de la ley nro. 6444 establece que “A los fines de garantizar a los candidatos de ambos géneros una equitativa posibilidad de resultar electos, la participación equivalente y proporcional establecida precedentemente deberá respetar imperativamente la postulación en forma alternada, es decir, intercalando uno de cada género por cada tramo de dos candidaturas. Cuando se convoque para elegir un sólo cargo titular, el candidato suplente deberá ser de género distinto al que se postule para aquél”.

Al respecto, la diputada que busca esta modificación, se hizo presente en el programa "Mónica y la gente" para dar su punto de vista respecto a lo acontecido el pasado martes, cuando en la Cámara de Diputados se conseguía la media sanción para hacer efectivo su proyecto.Aprovechando la oportunidad, Jiménez hizo un breve recuento histórico en el que recordó la ley Nro. 2412 donde se estableció la participación de mujeres en el quehacer político. Sin embargo, el hincapié recayó en el hecho histórico, ocurrido en Salta en 1998 cuando se estableció que las mujeres tenían derecho a tener el 30% de participación política, mientras que los hombres se encargarían de ocupar el 70% restante. Esta ley es la que continúa en vigencia, aunque, según Jiménez, “en las cámaras nunca se da, ni se ve un 30% de mujeres”. Es por esto que emprendió la tarea de pedir la reformulación del artículo 38 de la ley Nro. 6444.“Los tiempos van cambiando y la gente va naturalizando la participación de mujeres en diferentes ámbitos. El martes aprobaron la ley donde dice que en las listas de candidatura debe haber un 50% de participación femenina. Esta reforma fue aprobada por unanimidad en Diputados, lo que fue una sorpresa gratificante porque demuestra que la mujer ya no va atrás del hombre sino a la par”, declaró la Diputada por el Partido Justicialista.

Repercusión entre colegasEl proyecto fue tratado en la Cámara de Diputados el pasado martes, resultando con la aprobación por unanimidad. Esto refleja que los ediles provinciales se sienten conformes con la idea de que las mujeres amplíen su campo de acción en la toma de decisiones políticas.Por ejemplo, la diputada Liliana Mazzone pidió que este avance se replique en la Corte de Justicia y en el Gabinete provincial y no se limite solamente a cargos electivos. Las diputadas Gabriela Martinich y Emilia Figueroa también mostraron su apoyo, criticando a un medio gráfico local que publicó una nota de contenido sentencioso sobre el proyecto.

Entre los hombres, también hubo apoyo incondicional a lo propuesto por Jiménez. Es el caso del diputado Guillermo Martinelli quien señaló que “por una cuestión cultural, fuimos los propios hombres quienes menoscabamos los derechos de las mujeres”.

Otro ejemplo es Lucas Godoy, quien reconoció la tarea realizada por mujeres y manifestó que sería una iniciativa interesante que este planteo se replique en otros puntos del país.

Un poco de historiaHistóricamente, y sobre todo en nuestro continente, las mujeres fueron marginadas del ejercicio de la ciudadanía política. Esta discriminación en los ejercicios cívicos, fue modificándose paulatinamente y a costas del trabajo extenuante de diferentes referentes que hicieron posible que las mujeres puedan acceder a sus derechos como ciudadanas.

La sanción de leyes de sufragio femenino llegaron para permitirle a las mujeres sus primeras participaciones en las elecciones, sin embargo, el acceso a cargos representativos se produjo mucho después con la implementación de cuotas por sexo en las listas electorales.La ley de cupo femenino sigue siendo un tema en la agenda de legisladores, ya que es una herramienta institucional que busca resolver el problema de la escasa representación de la mujer en los lugares de decisión política. Argentina fue pionero en tratar el tema, cuando en 1991 se estableció el primer antecedente en el que figura que las listas de partidos políticos para cargos electivos nacionales deben tener como mínimo un 30% de candidatas mujeres. Este logro fue replicado en numerosos países del continente, entre los que podemos mencionar a Perú, Ecuador, Panamá, Brasil, Costa Rica, Paraguay, Bolivia, por mencionar algunos ejemplos. 

Fuente: Somos Salta