Indignación con un chofer de colectivo que no respetó la discapacidad de su hijo

Leopoldo Pistán, contó que su esposa subió a un colectivo con su hijo autista pero no le dieron el trato que merecía a pesar de tener el Certificado Único de Discapacidad. ¿Y los primeros asientos reservados para discapacitados?

Reclamo 22/02/2017

Mi hijo se llama Mateo y tiene autismo”, es el título de la carta que escribió Leopoldo Pistán, un salteño radicado en Santa Fé, que vino a visitar familiares a Salta y vivió una incómoda situación a bordo de un colectivo de Saeta. El hombre aseguró que el chofer del colectivo “no pidió un asiento para mi hijo” a pesar de haber presentado el Certificado Único de Discapacidad (CUD).

“Espero de corazón publiquen esta carta para contar una realidad de la ciudad de Salta que, como salteño, me avergüenza y a la vez me da impotencia”, inicia su relato Leopoldo. “Estuve una semana de visita en Salta. Paseamos y nos trasladamos en buses públicos (Saeta). Mateo sube con su CDU junto a su mamá y ningún chofer pidió el asiento para mi hijo, cuando iba lleno no pudo usar ningún asiento reservado para discapacitados”, añadió.

Tras realizar el reclamo correspondiente, Leopoldo aseguró que “el chofer nunca pidió el asiento y nos respondieron con una falta de respeto”.  Además reclamó que “manejan como si llevaran ganado, mi hijo se golpeó varias veces”.

El hombre aseguró conocer la legislación ya que es el presidente de una ONG de defensa de la niñez en su provincia.

Te puede interesar
Lo más visto

Recibí en tu mail los títulos de cada día