El más viejo del mundo: a los 123 años está perfecto y afirma que su único secreto es “no tener sexo ni comer picantes”

Un pasajero llamó la atención de los agentes de inmigración en el Aeropuerto Internacional de Abud Dhabi, capital de los Emiratos Árabes Unidos. Se trata de un anciano nacido en India, en 1896.

Precisamente este último dato fue el que alborotó a los oficiales, quienes creían que Swami Sivananda tendría por lo mucho 90 años, informó Mirror. Sin embargo, el anciano comprobó su edad mostrando su pasaporte.

Luego de que Sivananda se hiciera conocido por los medios escritos con su particular historia, decidió contarles a todos cuáles eran los secretos para su longevidad.

Swami perdió a sus padres cuando tenía seis años y fue entregado a un gurú espiritual. Él le hizo viajar por toda la India y finalmente se quedó en Varanasi. Allí creció en la pobreza extrema y despertó su vocación por ser monje.

“Llevo una vida simple y disciplinada. Como muy simple, solo alimentos hervidos, sin aceite o especias”, cuenta el hombre.

Además, también realiza yoga por dos horas todos los días y evita comer frutas y tomar leche. Según afirma, porque son “alimentos sofisticados”, aludiendo a que de niño durmió muchas veces con el estómago vacío.

Sin embargo, si algo le ha permitido llegar a los 123 años, asegura, es que no practica sexo y no come picantes.

“Solo quiero que las personas sean felices, saludables y pacíficas", agrega.

De ser cierta la edad de Swami, significa que es el hombre más viejo del mundo. Actualmente, en el Guinness de los Récords figura Kane Tanaka, una japonesa de 116 años y 278 días.