Patotas amedrentan a los vecinos de Limache

El periodista del programa 53G, Nicolás Ríos, junto al conductor del ciclo Martín Grande, realizó un informe sobre los grupos antagónicos de la zona Sur, uno de los sectores más conflictivos de la capital salteña.

La inseguridad y la violencia ocasionada por las patotas mantienen atemorizados a los vecinos. Los propios habitantes sostienen que la zona Sur, con una población estimada en 22 mil habitantes, es “tierra de nadie”.

Uno de los barrios más complicados es Limache, donde conviven 8 patotas que generan conflictividad social y cometen delitos incluso contra sus propios vecinos. Los grupos de la I y III tienen una enemistad marcada desde hace varios años.

Javier, protagonista de uno de los grupos, explica que en los enfrentamientos entre estos bandos “vale todo”. “Acá hay conflicto de hace años. Al momento de los quilombos, si ellos sacan fierro (revólver) o cadenas, nosotros también”, describe.

Además expresa que pese a las intervenciones policiales es casi imposible terminar con las peleas entre patotas. “No se acaba más, porque si no son ellos, somos nosotros, si ellos nos apedrean, al otro día vamos nosotros”, explica.

En ese sentido, sostiene que la Policía no entra al barrio porque son pocos y “saben como son los changos”. “Esperan que venga infantería para recién entrar porque cuando estamos cruzados con los vagos, les respondemos a los canas”, dice.

No obstante, sostiene que ya no se comercializa drogas en el barrio porque ya hubo 4 personas muertas. “Ya no se vende nada porque tenemos 4 finaditos que se han ido por la base”, detalla.

Las patotas están integradas por grupos de 15 a 20 personas, de 13 a 25 años, con alta nivel de conflictividad, adictos a las drogas y la mayoría de ellos con antecedentes penales.

La mayor demanda de intervenciones policiales, se debe a contravenciones tales como el consumo de alcohol en la vía pública y ruidos molestos. Además hay muchos llamados por violencia familiar, por consumo de drogas, robos y hurtos.

Pese a los datos escalofriantes de esa realidad social, el Centro de Coordinación Operativa logró disminuir la demanda de los vecinos en los últimos tres meses y redujo el tiempo promedio de respuesta a los 7 minutos.

Desde la institución sostienen que se ocuparon de identificar a los conflictivos, los lugares y horarios de encuentros y reforzaron patrullajes en la zona para combatir este flagelo.

Fuente: FM 89,9 - Canal 10 Norte Visión