Un camino que inició en Salta y terminó en Medellín

José Bernal es un salteño de corazón que en el 2014 decidió emprender un viaje sin retorno a su tierra. Su deseo de recorrer Sudamérica, lo llevó por varios países hasta llegar a Colombia, donde encontró su hogar y una familia.

Sociedad 25/07/2018 Salteños por el mundo

A sus 28 años, José Bernal decidió romper con la estructura y soltar la vida que llevaba en Salta y viajar. “Empecé a viajar en marzo, salí de Salta y recorrí Sudamérica por tierra. A fines de julio del 2014 llegue a Medellín en Colombia, pero pasó más de año hasta que me quedé que fue en octubre en 2015” relató a InformateSalta.

Antes de emprender su aventura por Sudamérica, José tenía una revista como emprendimiento personal y trabajaba en los medios de comunicación. “La idea de viajar era muy fuerte y necesitaba oxígeno para conocerme a mí y al mundo. Tras la ruptura de una relación, me decidí a arreglar mis cosas, dejar la revista en manos de un amigo y dejar la radio. Era hora, varios amigos lo habían hecho y eso es como que me incentivó un poco más la partida” continuó.

Sin dejar de lado los sentimientos, reconoció que resultó costoso salir de su provincia y desprenderse porque siempre uno vive apegado a los sentimientos o a las cosas materiales. En esta ocasión el deseo de conocer nuevos caminos fue el motor determinante que impulsó todas las decisiones posteriores.

Luego de tres años de vivir en Medellín, José contó a InformateSalta que es una ciudad muy linda como gran parte de Sudamérica. “Vas conociendo gente nueva, costumbres nuevas, paisajes nuevos, que a uno lo hacen sorprender y es muy grato ver todo eso. Sos parte de todo eso, sos una persona nueva, un nuevo yo y eso está muy bueno…”

“El costo de vida es barato pero también el sueldo básico es muy poquito pero te alcanza para que puedas vivir dentro de todo bien. Hoy me re sirve mi profesión” aseguró José recordando su paso por la Universidad Católica de Salta donde egresó como Licenciado en Comunicaciones Sociales y Locutor Nacional.

Tras varias experiencias laborales decidió iniciar un emprendimiento gastronómico en Medellín junto a un amigo. “Me dedico a vender y es una herramienta que saqué de las comunicaciones. Vendo y lo bueno es que la gente es muy cálida y al extranjero en sí lo trata muy bien”.

En cuanto a las diferencias que existen entre Argentina y Colombia, José destacó los desayunos. “Acá se come el calentado que es con arroz y frijol, lo podes combinar con un pedazo de carne de res o de cerno, huevos revueltos con cebolla y tomate. Te podes tomar un café o algún jugo, es un poquito más potente” describió el salteño.

“Medellín es una ciudad hermosa, en pleno crecimiento. Todo es muy voluntarioso con mucha garra de la propia gente. Hay una economía muy fuerte el país es muy arraigado de sí mismo. Acá me di con los ´paisas´, que son muy regionalistas. Tenes la bandeja ´paisa´ que le dicen trifásico porque tienen carne de res, cerdo y pollo. Al ser muy regionalista la ciudad, es un arma de doble filo porque hay que llegar a la gente. Es muy importante decidir quedarte a vivir y participar de sus costumbres. ”

José se consideró un “camaleón” ya que su adaptación en el país colombiano no fue algo traumático. “Me ayudó que la gente sea buena y que elegí el país donde quería quedarme. También me ayudó el clima. En Medellín todo el año la mínima es de 15°C y la máxima se mantiene en 25°C”.

Sin lugar a dudas, su adaptación a las tierras colombianas también fue gracias a encontrar la que hoy es su compañera de vida y con quien tuvo a Juan José, su primer hijo. “Es muy lindo, es muy gratificante, es lo mejor que me pasó en la vida. Sin lugar a dudas, Carolina y Juan José son lo mejor y espero que siga creciendo la familia. Juanjo es colombiano y argentino”.