El hijo de Marisa Coliman compartió un fuerte mensaje en las redes sociales contra Nicolás Ezequiel Medina, el joven detenido por el crimen ocurrido en Río Negro.
Luis Beltrán es un pueblo rionegrino de poco más de 5 mil habitantes donde “nunca pasa nada”. Es por eso que no salen todavía de la conmoción por el femicidio de Marisa Coliman, la mujer asesinada días atrás de 35 puñaladas por un amigo de su hijo que se había obsesionado con ella e intentó violarla.
Nicolás Ezequiel Medina, el principal y único acusado por el hecho, fue imputado y alojado con prisión preventiva en la cárcel de encausados de Choele Choel. Tras su detención, se supo que tenía una causa previa por abuso sexual.
En las últimas horas, Oscar, el hijo de la mujer de 44 años asesinada por Medina, volcó toda su bronca y su dolor en las redes sociales a través de un mensaje dirigido directamente a quien era su “amigo” y ahora se encuentra detenido por el crimen.
“Cobarde, no tuviste piedad por mi madre que hasta te había brindado un plato de comida. Te abrimos las puertas de la casa y le sacaste la vida sin piedad. Cobarde, ‘violín’, te aprovechaste mientras ella dormía sola y después quisiste conmigo pero gracias a Dios pude salir. Traicionero, te vas a pudrir en el infierno”, escribió el hijo de Coliman en su perfil de Facebook.
Para la familia de Marisa, Medina estaba “obsesionado sexualmente” con la víctima y planeó el ataque con premeditación: le pidió permiso a su amigo para quedarse a dormir en la casa de ellos primero, después buscó la forma de que Oscar saliera solo a comprar bebida y entonces aprovechó el tiempo que él estuvo afuera para intentar abusar de su madre. Tras cometer el crimen, se escapó en una moto que había dejado escondida cerca de la casa.
El descargo del hijo de Marisa Coliman en Facebook.
“Se fue a su casa y se bañó”, relató sobre la frialdad del asesino Carlos Coliman, uno de los hermanos de Marisa, en diálogo con Nosotros por la Mañana (Eltrece). Y agregó que si bien Medina trató de eludir a las autoridades fue “su padre quien lo entregó” media hora después. Todavía consternado por lo ocurrido, remarcó: “Nunca le noté nada raro, para mi no mataba ni a una mosca”.
Crueldad, saña y ánimo de causar dolor
De acuerdo con la reconstrucción de los hechos, la noche del crimen Medina le pidió a su amigo que fuera a comprar cerveza. Cuando Oscar salió, trabó la puerta que da al exterior con un tronco de grandes dimensiones e intentó abusar sexualmente de la víctima.
Marisa se resistió con todas sus fuerzas al ataque y, al no poder concretar sus planes, el joven la atacó a puñaladas con un cuchillo tramontina. En diálogo con los medios locales la fiscal a cargo de la investigación indicó que Coliman tenía más de 30 heridas cortantes y consideró que la modalidad del crimen refleja “crueldad, saña y el ánimo de causar dolor y sufrimiento extremo a la víctima”. /TN
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