“No es algo ilegítimo que un fiscal marche por la verdad”
El vicepresidente de la Asociación de Fiscales y Funcionarios de la Nación, Ricardo Toranzos, participará hoy de la marcha de silencio en honor al fiscal, Alberto Nisman. El salteño dio sus motivos.
En una charla con La Voz de Salta. dijo: “La marcha no es para polemizar con la presidenta, sino por respeto y en honor a Nisman”. El fiscal federal 1 de Salta, quien reconoció que tras la muerte de su colega desde el sector de los fiscales esperaban gestos acorde a lo que había sucedido el 18 de enero pasado en el edificio de departamentos Le Parc, donde vivía Nisman.
“Así como cuando un policía muere; como sucedió con el comisario Néstor Píccolo en Salta, sus superiores y los funcionarios del gobierno salieron a expresar sus condolencias y a comprometerse con la averiguación de lo sucedido, los fiscales esperábamos eso mismo, sin embargo, no hubo una reacción. Aunque sea algún gesto, como declarar días de duelo o una bandera a media asta, pero nada de eso hubo”, explicó Toranzos.
“En vista de ello –agregó- es que surgió la marcha como la materialización de un acto de respeto hacia Nisman. No se trata de nada político ni sectario o partidario, es simplemente un gesto que los fiscales creemos no se dio a un hombre que perdió la vida en la búsqueda de la verdad”. Toranzos no desconoció tampoco el peso político que la marcha adquirió y la exigencia implícita que esta manifestación acarrea.
Todos quieren saber la verdad de lo que pasó con Nisman. “¿Por qué no los fiscales? Acaso, ¿no somos el sector con mayor legitimidad e interés en saberlo?”. Respecto al posible uso político de la marcha, una manifestación que amenaza con convertirse en el mayor reclamo público en los últimos años en Argentina, Toranzos sostuvo, en consonancia con Carlos Donoso Castex, presidente de la AFFUN, que “eso corre por cuenta de quien lo aproveche para sacar un rédito partidario de la marcha”. Asimismo, Toranzos reconoció que la movilización, en realidad gestada a los días de la muerte de Nisman, cobró en los últimos días un inusitado interés y se intenta instalar la marcha como un eje de polémica y cuestionamientos respecto a los efectos de la movilización.
En este sentido, y respecto a una posible advertencia hacia los fiscales y jueces de ser pasibles de recusación por participar de la marcha, Toranzos lo descartó de plano y sostuvo que lo que se intenta poner en dudas es la legitimidad. “No es algo ilegítimo que un fiscal marche por la verdad”, alegó. Castex, en tanto, fue más allá y en una declaración al diario La Nación sostuvo que “los fiscales no necesitamos que estas demostraciones tengan que ser avaladas desde del Procuración General de la Nación” en clara alusión a la procuradora, Alejandra Gils Carbó, quien a causa de su estrecho vínculo con el Poder Ejecutivo Nacional, se encuentran seriamente cuestionada. Aunque no ahondó en detalles, Toranzos reconoció ciertas presiones internas dentro de la justicia a raíz de la movilización, en especial cuando respondió respecto a cuántos fiscales lo acompañaban a la marcha en Capital Federal.
“El fiscal no tiene miedo”
Al referirse a Nisman, el fiscal salteño expresó que lo conocía, aunque no tuvo mucho contacto personal con él, sino de algunos seminarios o talleres propios del oficio. “Me enteré a la madrugada, tras un llamado y la verdad es que cuando me dijeron lo que había sucedido, sencillamente no lo creí. Me parecía algo imposible de suceder”. Respecto a la idea del suicidio, Toranzos también expresó sus dudas en torno a esa hipótesis.
“Me cuesta creer que un fiscal pierda la vida horas antes de su mejor momento profesional, como iba a suceder el día lunes al momento de presentarse en el Congreso de la Nación”, sostuvo. En cuanto a la denuncia que Nisman había hecho en contra de la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, y otros funcionarios de alto rango del Gobierno Nacional, el fiscal reveló que “los fiscales se toman suficientes tiempo en materia de investigación, sobre todo a la hora de reunir pistas e indicios, por más mínimos que parezcan.
En este caso hablamos de un fiscal que llevó este tipo de tarea por más de diez años para recién avanzar con la denuncia que hizo, por lo que no hay razón para decir que no fue hecha a conciencia de los elementos de pruebas que logró obtener”. Toranzos también remarcó la actitud del fiscal Nisman tras la denuncia. “El miedo es incompatible al rol del fiscal”, afirmó. Y en este caso no se vio eso, sino un fiscal que radicó una denuncia y luego de ello no evidenció miedo, más allá de que reconoció el riesgo que atravesaba”, explicó.
“Lo más dramático es que ese miedo ahora se trasladó a la gente y es más notorio debido a que está potenciado con la incertidumbre de lo que sucedió con Nisman. Yo advierto, tanto en los pasillos de los tribunales y entre los colegas, como en la población en general, mucha angustia y congoja por la muerte de Nisman”. En cuanto a su confianza de que se esclarezca la muerte del fiscal, Toranzos se mostró esperanzado en que se llegue a la verdad, no sólo por una necesidad que tienen todos los argentinos de saber sino para fortalecer uno de los pilares de la república, como es la justicia.
“La muerte de Nisman se ha convertido en un paradigma que la sociedad exige que sea descubierto para el bien de los argentinos, y no como una cuenta pendiente que no se pudo o supo resolver. Y por ello, es que la marcha también es una señal de apoyo para la fiscal y la jueza que investigan la muerte de Nirman, quienes deben sentirse ahora más que nunca que no están solas”, explicó el fiscal.
Fuente: La Voz de Salta