¿Por qué EEUU no puede atacar a Corea del Norte?
Donald Trump movilizó una flota para hacer ensayos militares en el mar de Corea. Pero la Casa Blanca sabe que la respuesta militar es la peor alternativa.
Luego de enviar una flota de guerra al mar de Corea, Donald Trump se apresta a elaborar nuevas sanciones contra el régimen de Pyongyang, mientras busca conseguir la cooperación de China. Al parece, no habrá respuesta militar más allá de los ensayos efectuados junto a Corea del Sur por una simple y poderosa razón: si EEUU dispara sus misiles contra Corea del Norte, la respuesta provocaría una devastación en los países aliados, principalmente, Seúl.
Incluso sin el recurso a armamento nuclear, químico o biológico, el número de bajas en Seúl sería elevadísimo.
La capital surcoreana se encuentra a apenas 56 kilómetros de la frontera, y al menos un tercio de la ciudad está a pleno rango de tiro de la artillería norcoreana.
El experto militar Roger Cavazos ha elaborado un informe en el que realiza una estimación de bajas en caso de que se produjese un intercambio de fuego convencional entre ambos ejércitos. “Si el Ejército Popular de Corea del Norte opta por disparar contra Seúl en lugar de atacar de forma prioritaria objetivos militares, habría unas 30.000 bajas en muy poco tiempo”, argumentó.
Los muertos en esa primera jornada podrían llegar a los 64.000.
“Esto podría hacer muchísimo daño”, evalúa Joseph Bermudez, analista del Instituto EEUU-Corea de la Universidad Johns Hopkins. “Si alcanzan un edificio alto con un par de salvas de artillería, la gente se abalanzaría sobre sus automóviles, provocando grandes atascos, así que Corea del Norte podría apuntar a las autopistas y los puentes en cascadas”, especula en declaraciones al diario The Washington Post.
Los obuses tardarían apenas 45 segundos en impactar en suelo norcoreano.
Cuando Pyongyang empiece a perder la guerra
Cavazos opina que las baterías surcoreanas lograrían ir eliminando la artillería norcoreana a un ritmo de un 1% cada hora, a lo que se suma la vulnerabilidad que supone el uso de vehículos para mantener las líneas logísticas de las tropas fronterizas norcoreanas, que podrían ser atacadas por la aviación surcoreana o estadounidense.
Pero en caso de empezar a perder la batalla, el temor de muchos es que el régimen decida recurrir a armamento no convencional, multiplicando exponencialmente el número de bajas.
Los servicios de inteligencia de EEUU creen que Corea del Norte posee uno de los mayores arsenales químicos del mundo, un programa de armas biológicas y un importante departamento de ciberguerra, además de entre 10 y 25 armas nucleares.
Se trataría de una medida desesperada.
“Si Corea del Norte utilizase armas químicas y biológicas, cualquier conflicto escalaría rápidamente hacia uno de intento de cambio de régimen en Pyongyang, y es por lo tanto un movimiento antiestratégico (no hay otra estrategia que intentar causar mucho daños), inconsistente con los objetivos de supervivencia del régimen de Corea del Norte”, señaló Cavazos.
“Además, la gran mayoría de víctimas de cualquier ataque de este tipo serían civiles. Muchos de ellos, probablemente varios miles, serían chinos, dado que representan el 70% de los nacionales de terceros países en Seúl”, indicó el especialista.
Por ello, entre otras razones, China es una de las principales interesadas en que la situación no escale.
El régimen es perfectamente consciente de que este recurso sería a vida o muerte, por lo que, al parecer, ha hecho planes en consecuencia.
Según un alto oficial desertor del ejército norcoreano, en caso de guerra Corea del Norte pretende lanzar una rápida operación para ocupar toda la península coreana, antes de que Estados Unidos pueda enviar tropas de refuerzo desde otras bases de la región.
Victor Cha, un antiguo miembro del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, explica en un reciente libro llamado "El Estado Imposible" que la invasión empezaría con un ataque químico contra la población surcoreana. "Un arsenal de 600 misiles Scud químicamente armados serán disparados contra todos los aeropuertos surcoreanos, estaciones de tren y puertos marinos, haciendo imposible la huida para los civiles", escribe.
Una oleada de misiles similares podría ser lanzada contra Japón, retrasando el envío de soldados estadounidenses.
Según un artículo aparecido ayer en la revista Newsweek, los planificadores militares estadounidenses creen que las tropas norcoreanas tratarían de forzar su avance hasta Seúl antes de que EEUU y el ejército surcoreano puedan lanzar represalias que alteren la situación de forma definitiva.
"Esas serían las peores condiciones de combate que puedan imaginarse: una densidad extremadamente alta de enemigos y fuerzas aliadas, más de dos millones de fuerzas mecanizadas convergiendo en un espacio de guerra total equivalente a la distancia entre Washington y Boston", señaló Cha.
"Los soldados estarían combatiendo con escasas defensas contra la artillería de la República Democrática de Corea del Norte, bombardeos aéreos, y en un entorno de guerra urbana contaminado por 5.000 toneladas métricas de agentes químicos", afirma.
¿Podría Pyongyang recurrir a las armas nucleares?
“Probablemente la primera respuesta de Corea del Norte no sea nuclear. Tienen diferentes niveles de escalada a los que recurrir antes de optar por las armas nucleares”, opinó John Schilling, especialista aeroespacial, en un encuentro organizado por el portal especializado 38 North.
Schilling subraya que Pyongyang no será capaz de colocar cabezas nucleares en misiles balísticos intercontinentales al menos hasta 2020, por lo que por ahora no puede lanzar un ataque atómico contra EEUU. “Esta no es una crisis inminente. La amenaza inminente es para Corea del Sur y Japón”, afirmó.