Trans a favor de la zona roja, pero "con control y no con persecución"
Daniela y Gissel, travestis que se ganan la vida como trabajadoras sexuales, se refirieron al ejercicio de la prostitución como una salida laboral. Aseguran que no tienen inclusión.
Daniela asegura que en el tratamiento de toda la normativa referente a su trabajo nunca se escuchó la voz de ellas, pero sí la de las ONG. Ambas coinciden que si se prohíbe la prostitución, volverían a trabajar de lo mismo, porque con 40 años y una condición de trans es difícil conseguir trabajo “la mayoría somos analfabetas, son jefas de hogar, mantienen a su familia. Las que pueden estar incluidas en un trabajo son la minoría” contó Daniela.En cuanto a la posibilidad de instalar una zona roja dijeron que "sería positiva", pero siempre y cuando la policía controle la actividad dándoles seguridad en su labor y no persiguiéndolas como lo hacen hoy, donde muchas de ellas son víctimas de robos, abusos y todo tipo de delito, pero no son consideradas víctimas “La única manera que se muevan de la calle es que nos den un lugar. Lo que se dio en la legislatura es porque estamos cansadas. La policía nos reprime todas las noches. Algunas emigraron a Buenos Aires y al exterior. Me parece que hay que Cada una elija su camino, la que puedan salir de la calle está bien bienvenido” expresó Gisel una de las trans dijo que no les quedó otra que la prostitución. Que su condición de transexual siempre fue un impedimento para realizar otros trabajos. “Queremos mejores condiciones de seguridad, salubridad y porque no pagar impuestos y jubilarse como prostitutas”.
Fuente: FM 89,9 - Canal 10 Norte Visión