Cintia Tapia, víctima de una primavera sangrienta

Cintia Tapia tenía 25 años, una historia de vida triste, llena de dificultades. Era mamá y hacía poco tiempo le habían quitado la custodia de sus hijos, sufría adicciones que la llevaron a romper vínculo con su familia. A pesar de ello intentaba mejorar. El 21 de septiembre de 2017 se juntó con unos amigos en el camping El Préstamo, en Coronel Moldes, para celebrar. A las dos de la madrugada fue al baño y minutos después la encontraron muerta.

Un joven que pasó por el sector de baños la encontró, ensangrentada, con los pantalones bajos y de inmediato dio aviso a Policías que custodiaban el predio. En ese instante intervino la Fiscalía de Graves Atentados contra las Personas (GAP) y  Ramiro Ramos Ossorio ordenó la preservación de la escena.

En diálogo con InformateSalta contó: “Ese día desgraciadamente el cuerpo de la joven fue encontrado por un muchacho.  Se pudo preservar el lugar, creo que hicimos un trabajo adecuado del abordaje y mecanismo, teniendo en cuenta que del registro en ese momento habían 1200 personas en el lugar, lo que significan 1200 potenciales homicidas. Es una tarea casi imposible de establecer”.  

“Lo que hicimos fue permitir el egreso de las personas del camping y hacer un control para  ver si alguno de ellos tenía indicios, lamentablemente hablamos de un crimen bastante sangriento, con mucha violencia, por lo que estimábamos que todavía podría haber estado en el lugar y tener secuelas.  En los controles que hizo la policía se detuvieron a cinco personas que tenían rastros de sangre en sus prendas de vestir,  se hizo un filtro y entre esos estaba Ramón Chocobar”, añadió.

Chocobar, de 23 años, con antecedentes por delitos contra la propiedad,  acostó a Cintia todo ese día, según sus amigos. Ellos fueron novios pero Cintia ya había terminado esa relación. “Aproximadamente a las dos de la mañana ella decide ir al baño, él salió por detrás con la intención de acompañarla sin que ella se lo haya pedido. Él regresa 40 minutos después, cuando le preguntan por las manchas de sangre en su ropa dijo que se había peleado con otros. La policía cuando lo detienen dio una versión incoherente”.

A pesar de su coartada, la fiscalía ordenó que analicen las zapatillas, pantalón y remera manchados, la sangre era de Cintia. En ese momento fue detenido e imputado.  “Está imputado por un delito que tiene una triple calificación, cada una de ellas de forma independiente trae consigo la pena de prisión perpetua. Femicidio, por mediar un contexto de violencia de género, por la relación previa, el intento de sometimiento sexual en el lugar donde se produjo el homicidio, alevosía y ensañamiento”, explicó.

Según explicó la hipótesis es que Chocobar habría intentado forzar sexualmente a Cintia y ante su negativa agarró una piedra y le aplicó al menos seis golpes en la zona del cráneo, provocándoles una fractura expuesta que desencadenó en una muerte casi instantánea.