Mateo Rivero, de solo 8 años, quien juega en la categoría 2010 de San Antonio, quedó preseleccionado en la prueba que River Plate realizó ayer en el estadio Martearena de la ciudad de Salta, y deberá viajar el viernes a Tartagal para superar una última instancia.

Sin embargo, su familia no cuenta con los recursos necesarios para cubrir la estadía en la ciudad norteña. “Por la situación económica se nos hace difícil viajar por eso solicitamos una colaboración. Estaremos muy agradecidos de su ayuda, desde ya muchas gracias”, explicaron desde su entorno.

Al respecto, Anahi Gemetro, mamá de Mateo, en diálogo con InformateSalta, contó que Mateo fue el único en su categoría que quedó seleccionado. “Cuando terminó el partido nos tomaron los datos y nos dijeron que este viernes tenía que estar en Tartagal para hacer la última prueba, y de ahí venían si se iba a Buenos Aires”, comentó.

La mujer contó que Mateo está muy ilusionado con llegar a un equipo grande. “Anoche me decía ‘mamá si yo me tengo que despedir de mis compañeros, voy a llorar’, y yo le dije que tiene que estar tranquilo y feliz, porque va a hacer lo que le gusta”, resaltó.

Por último, explicó que ya consiguieron los pasajes pero todavía necesitan juntar fondos para comer porque tienen que estar el día completo. “Toda su familia lo apoya, pero no tenemos de donde sacar”, subrayó.

El sueño de jugar en Primera

Mateo, quien hace tres años juega en San Antonio, participó el fin de semana pasado de un interprovincial en Chaco defendiendo los colores de Juventud. “San Antonio se lo prestó a Juventud, y jugó un intercolegial con ellos”, comentó.

Anahí señaló que empezó jugando en el 2008 porque no había chicos de su categoría. “Empezó jugando con chicos más grandes, el año pasado empezó a jugar en su categoría, y en una categoría de un año más también”, detalló.

Los interesados en colaborar pueden comunicarse con Anahí al 3875729230