Sociedad21/10/2018

Cuando el deseo de ser madre se vuelve todo para una mujer

Si bien en Argentina el día de la Madre es en honor a la Virgen los 11 de Octubre, el tiempo hizo que se abandonara este significado y que se volviera algo más comercial, dejando como fecha el tercer domingo de Octubre. Hoy te contamos la historia de una mamá que movió montañas.

Laura es una joven mujer que creció junto a su madre y su padre en una familia bien ensamblada. Pasaron los  años y se enamoró, de quien es hoy su actual marido, Juan Manuel, juntos decidieron empezar a construir una familia.

Pasaron los meses y el bebé no llegaba, empezaron a consultar a distintos especialistas en fertilidad, estudios le confirmaron la peor noticia, no podría quedar embarazada, pero llena de amor buscó la manera de volcar todo eso en alguien y así fue que entraron en el plan “familias cuidadoras” el cual ya no existe.



Un día, allá por 2014, sin pensarlo, Yoko llegó a sus vidas, una niña que necesitaba mucho amor, quizás siendo una señal de que todos sus caminos empezaban a abrirse, cumpliendo uno de sus tantos  deseos de cuando eran novios, que era poner nombres de origen japonés, para ella era una señal.

Así fue que la pequeña se ganó rápidamente el corazón de sus padres, y ella rápidamente se convirtió en “Su hija” por primera vez se sentía “madre”.



“Dios nos bendijo con una niña, que la llevamos a casa,  y al paso del tiempo fue tan lindo ese amor, tan único y recuerdo el día exacto que le dije a mi marido, ahora si me siento madre, no era un bebé, pero era mi hija, para mí era mi sueño cumplido. Soy madre y me siento su madre” recuerda emocionada.

Pero el destino o Dios tenían una sorpresa más para Laura, en las vacaciones de 2016 estando de paseo por Córdoba junto a su marido e hija, descubrió que estaba embarazada, fue algo mágico inexplicable o milagroso, no encuentras las palabras. Cree que el hecho de haber abierto su corazón para Yoko la llevó por el camino de este nuevo milagro, su Gran Milagro “Taro” que hoy tiene 2 años.

“A los pocos meses Dios me iluminó y me dio una Gran, Gran Bendición y tengo un varoncito, que ahora va cumplir 2 años y 2 meses. Gracias a ella gracias  a Dios y gracias a que la vida me ha dado esta oportunidad, y ahora soy doble madre. Los dos son mis hijos. Yo le rezaba mucho a la Virgen de la Dulce Espera, Dios nos va bendecir siempre, la Virgen nunca nos abandona"

Laura hoy  vive una vida muy agitada pero llena de amor junto a Yoko de 13 años y a Taro de 2 años que le cambiaron totalmente la vida. Entre mamaderas y libros el amor se alimenta y la convierten en una madre por dos pero a todo terreno.



Con esta historia que se resumen en 5 años intensos en la vida de Laura movida por el único deseo de ser madre, quisimos desde InformateSalta acercarles una historia de aceptación, amor y milagro, que quizás refleje la de muchas otras mamás en este día tan especial o lleve esperanza a tantas otras.

¡¡¡Feliz Día de la Madre!!!