Piden que Zancheta sea llevado a juicio por casos de abuso sexual
El ex obispo está acusado de abuso sexual simple continuado agravado por ser cometido por un ministro de culto religioso reconocido.
La fiscal María Soledad Filtrín formalizó el pedido de elevación a juicio de las dos denuncias que investigó donde se acusa al ex obispo de Orán Gustavo Zanchetta por abusar sexualmente de ex seminaristas.
En el escrito explicó que en las actuaciones se investigó el hecho denunciado el 6 de febrero pasado por un joven, “quien dio cuenta de episodios de contenido sexual sufridos en su perjuicio de parte de quien ejercía las funciones de obispo de la Diócesis de Orán, Gustavo Zanchetta, y que ocurrieron a partir de 2017”. Según la denuncia, tuvieron como escenario el edificio del seminario Juan XXIII, de Orán y en un domicilio particular de Los Toldos.
Filtrín sumó la denuncia de un segundo seminarista, que el 13 de febrero pasado denunció haber sufrido episodios de significación sexual y conductas inapropiadas “frente al público y en el ámbito privado”. Dichos acometimientos habrían ocurrido en la casa parroquial San Antonio, en el edificio del seminario Juan XXIII y la casa del Obispo. En este caso, los hechos se habrían registrado desde 2016.
En su fundamentación, la Fiscal destacó que “ponderados los elementos de convicción puede extraerse con meridiana claridad que la materialidad de los hechos han tenido plena corroboración, como la vinculación del acusado en su carácter de autor material”. En ese marco, recordó que se acreditó que al momento de acaecidos los hechos, los denunciantes revestían el carácter de aspirantes al sacerdocio.
El fiscal explicó que Zanchetta “actuó con ánimo doloso de involucrar sexualmente a las víctimas dando inicio al despliegue de actos y maniobras de seducción, manipulación y preeminencia por la función de superior jerárquico en el ámbito eclesiástico, logrando confianza, temor reverencial en las víctimas a través de tocamientos inverecundos cernidos en su cuerpo con clara significación sexual, quebrantando la voluntad de los mismos temerosos de perder su condición de seminaristas y poner fin con su vocación al servicio religioso. Dichos cometimientos fueron sostenidos en el tiempo y mayor reproche penal merece la conducta adoptada por el acusado por su condición de ministro de culto religioso reconocido, calidad ésta que demanda el deber de actuar con rectitud y apego a las normas morales y religiosas con mayor celo que la de un ciudadano común”.
Pericias psiquiátricas y psicológicas
El pedido de elevación a juicio incluye los resultados de las pericias psiquiátricas y psicológicas, realizadas por profesionales del CIF, con contralor de la profesional aportada por la defensa técnica.
Entre otros aspectos, el informe psiquiátrico indica que el acusado “presenta personalidad con rasgos psicopáticos (indicadores de manipulación, emociones superficiales, escasa capacidad empática); no presenta psicosis, ni otro trastorno mental que altere la relación con la realidad. Se vincula a través de interrelaciones dispares, ejerciendo poder sobre el otro, y que puede comprender la conducta desplegada y discernir actos socialmente reprochables. Zanchetta puede dirigir sus actos libremente”.