Una orden de restricción y un problema de larga data, la otra cara del intento de femicidio en el Castillo de San Lorenzo
Facundo Burgos, abogado del acusado, aseguró a InformateSalta que su cliente se quiso defender de un ataque de la denunciante pero nunca ejerció violencia. Ella no podía acercarse a 300 metros e ingresó a la fuerza al hotel. El hombre tiene artrosis en ambas manos.
Tras los hechos que tomaron trascendencia pública en los últimos días y que involucra al dueño del hotel Castillo de San Lorenzo en una denuncia por violencia de género, InformateSalta quiso conocer la otra campana y dialogó con el abogado del hombre, Facundo Burgos.
Durante la entrevista, el doctor contó a este medio una versión totalmente diferente a la que se viralizó en los medios locales y nacionales y, aseguró tener pruebas de sus dichos. Explicó que su cliente no ejerció violencia sino que solo estaba intentando defenderse de un ataque que sufrió por parte de la denunciante.
En primer lugar, aclaró que la mujer, supuesta víctima de intento de femicidio, no es una ex pareja, sino que mantuvo una relación casual mientras él estuvo separado, producto de la cual nació una niña, una menor que actualmente tiene 10 años y quien tomó la fotografía que se dio a conocer del supuesto ataque.
Además, aseguró que su cliente no está fugado, sino en unas vacaciones que había planificado con más de 30 días de anticipación, junto a su mujer y dos de sus hijas en Uruguay. “La supuesta víctima se entera que el señor estaba saliendo y se presume que intentó meterse en el Castillo de San Lorenzo, ya lo hizo una vez, estuvo 40 días ahí, que fue un problema judicial muy grande, se la terminó sacando por usurpación”, expresó.
En este sentido, subrayó que la denunciante tiene una prohibición de acercamiento al hotel y cuatro sentencias, de cuatro jueces diferentes que le prohibieron ejercer actos de violencia y mandar mensajes de cualquier tipo. “No tenía absolutamente nada que hacer dentro del hotel ni a 300 metros de ese perímetro”.
Pese a ello, Burgos indicó que ingresó arbitrariamente, sin ninguna autorización y cuando fue invitada, pacíficamente, a retirarse reaccionó violentamente. “Cuando ve a la actual mujer de mi cliente agarró una silla e intentó tirársela. Todo está filmado. Cuando intenta arrojar esa silla, mi cliente intenta agarrarla, en el forcejeo ambos se van yendo para la parte del patio del hotel, todavía dentro de la propiedad privada”.
En ese momento, el hombre entró y desde afuera la mujer empezó arrojar piedras, rompiendo alrededor de 5 o 6 vidrios de grandes dimensiones, lo que ocasionó que el denunciado saliera a intentar calmarla.
“Intenta reducirla sin realizar ningún acto de violencia, para intentar que no siga destruyendo El Castillo. El señor mide 1.60, es de contextura delgada, no puede oponer una resistencia, en ambas manos sufre de artrosis. Es un dato muy importante para la causa. Lo que hace es intentar agarrar las manos de la señora. En ese momento, la supuesta víctima se da vuelta y le dice a la hija tomarme la foto ahora”, manifestó.
Sobre el pedido de captura, que pesa tanto sobre su cliente como la mujer del mismo, consideró que fue motivado porque al momento en que la Fiscalía envió policías para verificar la denuncia, no pudieron localizarlo.
“La Fiscalía al no haberlo encontrado y sumado al hecho que se viralizó el tema, emitió el orden de captura con el allanamiento que se realizó el sábado. Pero nunca hubo un intento de fuga”, agregó.
Finalmente, el abogado aseveró que el Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF) ya cuenta con los registros fílmicos de lo sucedido. “Hoy hicimos las presentaciones, presentamos los poderes, ya tomamos intervención en la causa y, si nos permiten con el legajo de Fiscalía que va a estar habilitado para mañana, vamos a poder ya solicitar que se levante la orden de secuestro que pesa sobre ambos clientes míos”, concluyó.