Se confirmó que la zapatilla que mató a Fernando Báez Sosa corresponde a Thomsen
Una de las huellas de zapatilla que tenía en el rostro Fernando Báez Sosa, el joven asesinado a golpes de puño y patadas frente a un boliche de Villa Gesell el 18 de enero último, corresponde a la zapatilla del rugbier Máximo Thomsen.
Tras seis meses de investigación, la zapatilla negra ensangrentada que se encontró en la casa que alquilaron los diez rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa es de Máximo Thomsen, según le revelaron fuentes que accedieron al expediente a Infobae. Quién recibió esta clave para el caso fue la fiscal Verónica Zamboni.
Recordemos que hay un video que toma el momento exacto del crimen en la madrugada del 18 de enero pasado frente a la disco Le Brique en Villa Gesell que muestra al ex jugador del CASI con un calzado similar en los pies.
El complejo estudio, realizado por el Laboratorio Scopométrico de la Policía Federal en Mar del Plata, reveló que la marca del calzado estaba en el cuerpo de Fernando, coincide con uno de los acusados del asesinato, cuando se comparó la suela del zapato y la marca del pie en la pantilla.
Los pies de los rugbiers fueron identificados uno por uno con comparaciones fotográficas, lecturas de ondas de luz mediante un videoespectrómetro y el uso de tinta litográfica.
Zamboni aún se encuentra dentro del plazo de los 10 meses para la elevación a juicio y buscar recolectar más pruebas. /Pronto