Usurparon un terreno del jefe de bomberos voluntarios y lo atacaron salvajemente

En medio de la polémica instalada en la sociedad respecto a la toma ilegal de terrenos que hay en Salta y el país, una penosa situación es la que vivió el jefe de bomberos voluntarios de la Capital salteña, cuando él y su familia fueron atacados salvajemente por los usurpadores de su terreno.

Se trata de Walter Chávez, jefe del cuartel de Bomberos Voluntarios “Martín Miguel de Güemes”, quien en diálogo con Somos Salta dio a conocer los detalles de lo ocurrido, indicando en primer lugar que el terreno en cuestión era propiedad de sus padres, el cual ahora es suyo y del que demolió una vieja construcción que había en éste.

Si bien constantemente van al lugar a revisar cómo está, fue hace una semana que se toparon con una construcción en este terreno. Consultó a los vecinos quienes le dijeron que una familia había llegado al mismo, diciendo que lo habían comprado.

“Una persona, un tal Roque Zerpa, le apodan “el Indio”, se metió en una propiedad familiar, una propiedad de mis padres”

De inmediato Chávez fue a radicar la denuncia policial, obteniendo una consigna de la fuerza. Sin embargo, cuando el jefe de bomberos fue al lugar posteriormente para ver la consigna, ésta no estaba, pero sí una medianera y una tapia que los usurpadores habían levantado.

Chávez se dispuso a entrar al terreno cuando de pronto vio llegar un vehículo del cual bajó una mujer con un niño en brazos y sin mediar palabra atacó directamente a la esposa del bombero, usando al chico como escudo.

Zerpa, mientras, atacó a Chávez quien intentó defenderse con su barreta de bombero, pero su agresor le pegó una patada en la entrepierna. Cuando Chávez se dobla del dolor ve que la otra mujer golpea con un cascote a su mujer. A su vez dijo que aparecieron otras personas también a atacarlos, sintiendo los golpes de bloques de ladrillos que le propinaron.

“Nunca pensé en pasar por esta situación”, se sinceró tras lo ocurrido, quedándole tras este episodio lastimaduras y heridas, alguna de ellas en el rostro, por el salvajismo de estos inescrupulosos.

Foto ilustrativa.