Murió la primera persona reinfectada con una cepa nueva de coronavirus: tenía 74 años
Un hombre de 74 años que fue diagnosticado con coronavirus el mes pasado murió por reinfección de una cepa diferente del Covid-19, revelaron las pruebas recolectadas por el centro médico Sheba, el más grande de Israel.
El hombre fue uno de los pocos casos de reinfección por el nuevo coronavirus confirmada en Israel, y la primera vez en el país que esto causó la muerte del paciente. La noticia fue confirmada por el medio local Times of Israel.
Los médicos analizaron si el virus había estado oculto en el cuerpo del hombre, sin ser detectado por las pruebas, o si se había vuelto a infectar, una circunstancia que se ha registrado solo en un pequeño número de casos en todo el mundo.
"No sé qué tan frecuentes son estos casos", dijo la profesora Galia Rahav, jefa de la Unidad de Enfermedades Infecciosas y Laboratorios de Sheba. "No hay duda de que el hombre se contagió dos veces y que se había recuperado de la primera infección. Parece que fue golpeado por dos virus diferentes", recogió la plataforma Ynet, citada por la agencia de noticias Sputnik.
Después de ser declarado libre del virus la primera vez, el hombre fue llevado de nuevo al centro de atención geriátrica donde vivía, mientras que otras dos pruebas de coronavirus también resultaron negativas. Pero cuando se detectó un nuevo brote de Covid-19 en la residencia, fue examinado una vez más y resultó positivo.
Fue hospitalizado en el centro médico Sheba con dificultad respiratoria y las pruebas realizadas por el hospital confirmaron que había sido infectado una vez más y finalmente falleció a fines de noviembre.
Hasta el momento se identificaron cinco cepas principales de coronavirus, y las pruebas genéticas del hospital revelaron que la segunda infección era de una cepa diferente.
"Es muy preocupante que una persona pueda infectarse por segunda vez mientras el virus está mutando", dijo Rahav. "Nos preguntamos qué impacto tendrá esto en la vacuna contra el coronavirus y si pueden las personas infectarse varias veces", expresó.
El sábado 19 de diciembre, las autoridades sanitarias del Reino Unido alertaron sobre la presencia en el sur del territorio británico de una nueva cepa, que ha sido ahora detectada en casos en Italia, Australia y Países Bajos, entre otras naciones.
La variante, informaron los especialistas británicos, se propaga con más rapidez y, según las estimaciones iniciales, podría ser un 70% más contagiosa, si bien no hay evidencias de que esta mutación repercuta en la gravedad de los síntomas o en la eficacia de las vacunas.
En su página de Facebook, el genetista francés Axel Kahn recordó que, hasta ahora, "se han secuenciado 300.000 mutantes del SARS-CoV-2 en el mundo". La nueva cepa incorpora una mutación, llamada "N5017", en la proteína de la "espícula" del coronavirus, que le permite engancharse a las células humanas para penetrarlas.
Según el doctor Julian Tang, de la Universidad de Leicester, "esta mutación N501Y ya circulaba mucho antes, de forma esporádica, este año fuera del Reino Unido, en Australia en junio-julio, en Estados Unidos en julio y en Brasil en abril".
"Los coronavirus mutan todo el tiempo, así que no es sorprendente que emerjan nuevas variantes del SARS-CoV-2", recordó el profesor Julian Hiscox, de la Universidad de Liverpool. "Lo más importante es intentar saber si esa variante tiene propiedades que tienen un impacto en la salud de los humanos, los diagnósticos y las vacunas", indicó. /Infobae