Economía03/04/2014

Salta recibe menos dinero por habitante que el promedio nacional

Durante la última, el kirchnerismo aplicó la caja para disciplinar a gobernadores, intendentes y legisladores. La arbitrariedad es impactante. Las provincias más y menos beneficiadas. Diferencias.

En efecto, desde 2003 hasta 2013 (la "década ganada"), los recursos discrecionales (es decir, los que se giran por fuera de la coparticipación) que la Nación transfirió a las provincias aumentaron un 1046%.

Así lo confirma el último trabajo del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), que dirige Nadin Argañaraz. Según el informe, que elaboró Ariel Barraud, en 2003 los aportes discrecionales a las provincias sumaban 4456 millones de pesos y 10 años después treparon a la friolera de 51.096 millones.

No hay que ser demasiado perspicaz para averiguar qué provincias han sido las más beneficiadas en el reparto arbitrario de los recursos nacionales. Obviamente, encabezan el ranking aquellas más cercanas al Gobierno y en los últimos lugares figuran aquellos distritos que gozan de una mayor autonomía económica o son públicamente críticos de la gestión de Cristina Kirchner.

Pero lo llamativo es cómo Santa Cruz, la provincia mimada de los Kirchner, aventaja y por muy lejos a las demás.

Otra vez son las cifras las que reflejan claramente la disparidad. Según un informe del diputado y economista Enrique Vaquié (UCR), el año pasado Santa Cruz recibió 20.023 pesos per cápita en recursos discrecionales, seguida por La Rioja ($ 7142), Tierra del Fuego ($ 5845), Jujuy ($ 4720) y Formosa ($ 4605).

Entre las más castigadas figura la Capital, con 284 pesos per cápita; la acompañan en el lote Santa Fe ($ 1244), Buenos Aires ($ 1272), Mendoza ($ 1280) y Corrientes ($ 1370).
En el caso de Salta, recibe $ 1601 por habitante, cuando el promedio nacional es de $ 1853.

Estos datos se condicen en cierta forma con un informe que elaboró el año pasado la Fundación Mediterránea, para cuyo análisis tomó el último semestre de 2011 y el primero de 2012. En ese lapso, Buenos Aires fue la que más recursos discrecionales recibió, seguida, llamativamente, por Santa Cruz. Claro que, a la hora de dividir esos fondos por la cantidad de habitantes, la provincia de los Kirchner aventaja el ranking por lejos.

"Éste es un problema que excede lo meramente fiscal para convertirse en un problema político. Una de las soluciones para esto sería una drástica reducción de las facultades discrecionales del Poder Ejecutivo y cambiar la distribución entre las provincias para compensar las inequidades que se observan entre ellas", enfatizó a LA NACION el diputado Vaquié.

Estos fondos discrecionales son gravitantes en las arcas provinciales. Según la Fundación Mediterránea, los envíos que realiza la Nación por fuera de la coparticipación pasaron de constituir el 5% de los recursos totales de las provincias en 2000 a un 13% en 2011. Con estos fondos no coparticipables, los gobernadores reciben plata fresca para atender gastos corrientes (destinados a distintos programas sociales, por ejemplo) como de capital (obras públicas), todos ellos fundamentales sobre todo en años electorales.

Esta dependencia cada vez mayor de las provincias con la Nación tendrá un capítulo definitorio en las próximas semanas, cuando la Nación decida si refinanciará una vez más las deudas con las provincias. La última prórroga de la refinanciación ocurrió a fines del año pasado; el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y un grupo de gobernadores acordaron postergar por sólo un trimestre el pago de las deudas provinciales, plazo que vence a fines de este mes (de lo que se informa por separado).

Fuente: Región Norte Grande