Nueva normalidad: UCASAL se prepara para las clases presenciales
La UCASAL se prepara para el inicio de clases presenciales en el marco de la nueva normalidad, que impone la circulación comunitaria de COVID-19. Los protocolos fueron presentados y autorizados por el Comité Operativo de Emergencia y se ajustan los detalles para recibir a los alumnos desde el 1 de marzo próximo, y de acuerdo a la fecha fijada por cada carrera, en el Campus de Castañares.
En UCASAL se trabajó sobre un extenso documento en el que se exponen las pautas generales de trabajo, incluyendo las acciones que se llevarán a cabo en cuanto a la organización, limpieza, desplazamientos, permanencia en aulas y espacios especiales, uso de equipamientos, entre otras consideraciones.
Con respecto a la organización general, se establecerán horarios y jornadas o turnos académicos con el fin de evitar concentraciones y afluencia masiva de personas.
Se trabajará un modelo híbrido combinando actividades presenciales con actividades virtuales. La organización presencial tendrá en cuenta la asistencia de alumnos en días alternos, con un porcentaje de ocupación áulica que respete el distanciamiento.
Cada unidad académica adoptará las decisiones necesarias en torno al dictado de clases, determinando cuáles son las actividades clave e imprescindibles en este momento.
Protocolos de clases en el Campus
Entre los protocolos establecidos se destacan el uso obligatorio de tapabocas que cubra boca, nariz y mentón; solo dos ingresos al campus; señalización para facilitar la circulación de las personas; y controles obligatorios de temperatura.
Se facilitará sanitizantes para que los ingresantes puedan realizar la correcta higiene de manos y de calzado; y habrá alcohol en gel en oficinas, aulas y lugares comunes. Se asegura la adecuada ventilación de ambientes mediante el recambio de aire, manteniendo la abertura de puertas y ventanas para una circulación cruzada del aire.
Con respecto al distanciamiento, la ratio de alumnos por aula se reducirá para adecuarse a las normas vigentes. Las zonas comunes o zonas de paso se utilizarán lo mínimo imprescindible para los desplazamientos de un espacio a otro. El personal de las unidades académicas será el responsable de realizar los controles para garantizar el distanciamiento en cada edificio.
En laboratorios informáticos se hará uso individualizado de ordenadores, y se garantizará la limpieza y desinfección de los equipos después de cada uso.
En bibliotecas, aulas de estudio, aula magna y salas de reuniones la capacidad máxima y permanencia será la que permita mantener la distancia de seguridad.
A excepción de las zonas y recintos previstos por las autoridades de UCASAL para la actividad docente -estarán debidamente señalados-, el resto de los recintos se mantendrán cerrados, indicando la prohibición de acceso (zonas e instalaciones deportivas, salas de reunión, office, zonas de descanso).
En el caso de oficinas compartidas, se podrán compartir cuando se garantice la distancia mínima de seguridad entre las zonas de trabajo.
Se evitará el uso de vestuarios y duchas. No obstante, en los casos que fuera indispensable su uso se deberá mantener en todo momento la distancia de seguridad de 2 metros; se limpiarán después de cada turno de trabajo prestando especial atención a aquellos elementos que se hayan tocado con las manos, como pueden ser los grifos, las puertas de las taquillas, los bancos para sentarse, etc.
Alumnos con necesidades educativas especiales y vulnerable al COVID19
Se facilitará el acceso y participación de las personas con condiciones crónicas o discapacidad, a materiales, plataformas, información, para el aprendizaje; evaluando en cada caso la importancia del retorno a la institución, y las condiciones de seguridad que requieran.
Se priorizará este grupo poblacional teniendo en cuenta las dificultades que pueden darse en el acceso y manejo de las prácticas virtuales.
En caso de confirmar un caso positivo
Si se confirma un caso de COVID-19 entre el personal de la Universidad o entre el alumnado, se identificará a las personas que han tenido contacto con el caso y se aconsejará sobre las medidas que deben de tomarse.
En caso de presentarse un caso sospechoso, todo el grupo al cual pertenece el mismo deberá abstenerse de asistir a clase hasta que se confirme o descarte la infección con SARS-CoV-2.
De confirmarse, el grupo de estudiantes deberá considerarse contacto estrecho del caso confirmado y, en consecuencia, respetar el aislamiento durante catorce días a partir de la última exposición con el caso confirmado. Si se descarta, todo el grupo se reintegra a clase según la organización preestablecida. El docente que haya mantenido el distanciamiento adecuado con el grupo podrá seguir dando clases a otro grupo.