Imputaron a dos policías de Salvador Mazza por la muerte de un joven en extrañas circunstancias
El fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal, Gonzalo Ariel Vega, imputó provisionalmente a dos efectivos policiales, acusados del delito de homicidio culposo en perjuicio de Estéfano Alexis Leonardo Barrios, de 28 años.
Durante la audiencia de imputación celebrada este viernes, ambos imputados se negaron a declarar. El fiscal solicitó el mantenimiento de detención ante el Juzgado de Garantías 1. Las imputaciones recayeron sobre el oficial subayudante Gabriel Alejandro Pereira y el sargento ayudante Ariel Miranda, en grado de coautores.
La intervención del fiscal penal Gonzalo Ariel Vega, se produjo tras las actuaciones de prevención de la Comisaría 40 de Salvador Mazza, donde consta que el lunes 26 de abril, cerca de las 5:15, Estéfano Barrios caminaba por avenida 9 de Julio a la altura de la plaza de barrio Pueblo Nuevo, cuando fue divisado por el oficial subayudante Gabriel Alejandro Pereira, a cargo del control preventivo, y el sargento ayudante Ariel Miranda, a cargo del móvil policial 2063 como chofer, quienes se acercaron hasta donde estaba Barrios, de quien no surgió que hubiera cometido ningún ilícito.
Sin embargo, el oficial subayudante Pereira descendió del móvil policial y se dirigió hacia Barrios, momento en que éste se asustó y corrió en sentido sur a norte por avenida 9 de Julio, seguido por Pereira, también a pie.
En un momento, Barrios giró hacia la derecha y al llegar a calle Joaquín Castellanos, el oficial Pereyra subió nuevamente al móvil, para continuar una persecución de dos cuadras hasta darle alcance en calle Sarmiento, frente al puesto del Escuadrón 61 de Gendarmería Nacional, donde el chofer Miranda cruzó el vehículo del que descendió rápidamente Pereira, quien dio alcance a Barrios y lo hizo caer al suelo, mientras éste gritaba por ayuda.
Allí, el joven, atento al temor experimentado por la persecución, se produjo una herida cortante en el cuello con el filo del cuello de una botella rota.
Sin embargo, el oficial Pereira le colocó al joven herido las esposas, aun cuando ya no representaba peligro alguno, mientras que Miranda se dirigió al móvil policial a buscar una franela para taparle la herida y pedir una ambulancia, sin dar correctamente la dirección donde estaban.
Surgió que al llegar la ambulancia, el personal policial se encontraba en un principio parado al costado de la victima, pero cuando llegó el enfermero, los acusados actuaron de forma nerviosa.
Al constatar que Barrios todavía estaba con vida, el joven fue traslado en la ambulancia y murió camino al hospital.
De los hechos mencionados, surgió que los imputados incumplieron los reglamentos y deberes propios de su cargo, al realizar el procedimiento policial que derivó en la muerte Estéfano Alexis Leonardo Barrios, debido a un shock hipovolémico por lesión vascular grave.