Una junta integrada por médicos del CIF analiza el resultado de la autopsia realizada al cuerpo de Estéfano Barrios, el joven de 28 años que el pasado 26 de abril murió en dudosas circunstancias durante un operativo policial en Salvador Mazza.
En un primer momento se había informado que Barrios se había quitado la vida mientras intentaba huir de la Policía, incluso que era adicto. Sin embargo, pruebas demuestran que no habría sido así. “A mi hijo lo mataron los policías de Salvador Mazza”, aseguró su papá, Jorge Barrios, en un video que circuló en los medios locales.
Por otro lado, el abogado de la familia, Héctor Salomón, enfatizó que el personal policial que intervino en el operativo que seguía a Estéfano dio una versión poco clara y contradictoria sobre lo sucedido. “Aportamos videos y testimoniales de testigos que fueron esclareciendo la situación al fiscal”, remarcó el abogado en una entrevista con Central Policial por CNN Salta.
Salomón explicó además cómo fue la persecución a Barrios. “Un llamado a la base policial alerta sobre la presencia de una persona en actitud sospechosa en el puente de Salvador Mazza. Los efectivos se dirigen allí y encontraron a Estéfano. Le pidieron el documento y se fueron. Corroboran que él no estaba haciendo nada. Luego el joven se dirigió a una estación de servicio para pedir un remis y volver a su casa. Como no consiguió auto, decidió caminar y en la plaza volvió a encontrarse con los policías. El oficial Pereyra corrió detrás de él y luego subió al móvil que lo acorraló en una calle”, relató el letrado. “Personal de Gendarmería relató que escuchó sus gritos de auxilio, y que luego todo quedó en silencio”, agregó.
La ambulancia llegó minutos más tarde y trasladó a Estéfano al hospital local, pero el joven murió en el camino. Lo más doloroso para la familia Barrios es que el joven estuvo esposado todo el tiempo. “Murió esposado”, recalcó Salomón.