Sociedad Por: InformateSalta 21/06/2022

¡Atención, que no te pase! Quisieron estafar a un periodista salteño

Franco Camaño, un periodista salteño, contó lo que le ocurrió cuando quiso vender un cochecito de bebé que su hija dejó de usar. Junto a su pareja lo pusieron a la venta en grupos de Facebook, recibieron varias consultas entre las cuales se encuentra la de una mujer y quedaron en entregarle el artículo.

El intento de estafa comenzó cuando la mujer envió un audio de Whatsapp diciendo que su marido se había equivocado y le pedía corroborar en el homebanking si les había llegado una transferencia por el valor de $100.000.

“Fijándonos nunca ingreso ese dinero a la cuenta. Le avisamos a interesada en la compra y nos envía otro audio diciendo que su marido ayer lunes feriado pudo comunicarse con el banco, y que le suspendían la cuenta por seguridad y protocolo y que a nosotros nos iban a llamar del banco para verificar y comprobar que la transferencia y el descongelamiento se realice”, contó Camaño.

“Nos llamó un tal Carlos Dante Araoz diciendo que realizaremos todo lo correspondiente sin cortar la llamada y a través del celular nos envió un link que nos dirigía a un formulario que deberíamos completar”, siguió el relato del hombre quien manifestó que en un momento les pareció todo extraño. 

Contó que le consultaron como sabrían ellos si era real que él trabajaba en el banco. “Nos dio un número de matrícula diciendo que podríamos buscarlo en Google pero luego de cortar la comunicación porque en ese momento no lo podríamos hacer”. Desde otro teléfono lo buscaron igual y el buscador decía que no tenían datos de esa matrícula.

“Se lo manifestamos e inmediatamente dijo que esa operación ya no la íbamos a poder realizar por teléfono y que tendríamos que dirigirnos al banco con escribano público y cortó”, agregó.

Por último, el periodista hizo un llamado de alerta: “Desconfíen de todo lo que parezca fácil, nosotros por suerte nos dimos cuenta a tiempo, pero hay muchos que caen en el cuento del tío y les sacan préstamos o créditos o sus datos son utilizados para realizar operaciones muy truchas”.