Dejó todo, llegó a Salta y ahora exporta vinos de altura a Europa

Agustín Lanús, de Bodega Agustín Lanús Wines, es ingeniero agrónomo y sommelier, con un máster en Ciencia de la Viticultura y Enología del prestigioso programa europeo, Vinifera EuroMaster. Luego de sumar experiencias en muchas regiones vitivinícolas, en 2013, dejo todo, llegó a Salta y se instaló en la provincia para explorar los micro terruños únicos que se encuentran en las regiones de extrema altura del Valle Calchaquí.

Estos, que van desde los 1650 a los 3100 metros sobre el nivel del mar, albergan algunos de los viñedos más altos del mundo que están ubicados en las tres provincias argentinas que componen el Valle Calchaquí. Marca entonces una diferencia notable de los europeos, que alcanzan mayormente los 1300 metros.

“Los Valles Calchaquíes son una cosa de locos, es un desierto en donde a medida que hay alguna vertiente de agua se arman vallecitos donde la altura, los vientos, la exposición solar y la formación de suelos son totalmente distintos”, afirma Lanús. 

“El resultado es el logro de vinos muy distintos entre sí. Lo que más me apasiona es tratar de mostrar esa diversidad, ese paisaje, esa cultura en cada copa”

Contó que cuando llegó en 2013, se encontró con las primeras cosechas de muchos viñedos muy chicos de Malbec. “Ese año hice 12 microvinificaciones de distintas zonas de Salta, Tucumán y Catamarca. La diversidad que encontré, la tipicidad que mostraba cada zona, fue mi inspiración para seguir explorando”, dijo el enólogo.

Luego, en 2014 descubrió la uva Criolla Chica, presente en los jardines de la mayoría de las casas que están en el valle- “Fue un amor a primera vista. Dan unos vinos frescos, elegantes, fáciles, pero a la vez hiper complejos”, añadió.

Por otro lado, las características climatológicas de estas regiones aseguran una sanidad natural por lo que las uvas están libres de hongos y otros problemas que se dan habitualmente en zonas de suelos arcillosos y con mayor humedad ambiente.

Mercado externo

Todo esfuerzo tiene recompensa, por eso, en 2018, la bodega exportó su primer vino a China: Sunal y Bad Brothers, cosecha 2013 y 2015. “Siempre fue mi sueño llevar el vino que hacemos a todas partes del mundo. Por eso a nuestros vinos los lanzamos al mercado interno en 2017 y ya en 2018 estábamos exportando a América Latina.

Actualmente, la bodega produce unos 60 mil litros anuales de vinos y exporta el 60% de su producción a Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, China, Brasil, Perú y Paraguay.